El Atlético saca excesivo premio a su mal partido

En un mal partido del Atlético y, gracias a una acción a balón parado y a un gol en el tiempo añadido, el Atlético de Madrid se reencontró con la victoria después de cinco jornadas, para volver a acercarse a Europa y mantener sus opciones de ‘Champions’. Simeone aseguró que el cansancio no sería excusa frente a un Granada cerca de los puestos de descenso, pero el Atlético sí acusó el partido del jueves ante el Besiktas y no se pareció en nada al que goleó al equipo turco en el mismo escenario. Lento, muy atascado, y con sus delanteros casi desaparecidos, el conjunto rojiblanco ganó con lo mínimo al Granada, y obtuvo excesivo premio para los méritos que hizo. Recurrió a su experiencia y se aprovechó de su efectividad y de la debilidad del equipo dirigido por Abel Resino para sumar tres puntos importantísimos en un choque muy feo y frío. Apenas hubo ocasiones, y solo se encargó de animarlo algo al final Falcao, ya en el descuento, con un gol y un remate al palo.

El conformista Atlético de Madrid sacó petróleo de un córner que llegó precedido de una falta por mano de Henrique que no existió, porque el Granada no fue inferior en la primera parte, y tras el descanso se dedicó a mantener su ventaja y a dejar morir un encuentro siempre insulso y carente de juego. Tampoco sufrió el Atlético en la recta final, porque el conjunto andaluz se quedó con diez en los últimos minutos por una roja directa a Henrique que no mereció, y ya en superioridad, aunque sin un ápice de ambición ni intensidad, los rojiblancos ampliaron su ventaja. También le faltó muchísima más mordiente al Granada, que apenas tuvo una oportunidad para dar algo de emoción a un encuentro para olvidar. Desequilibrado en el marcador, aunque no sobre el terreno de juego, porque los visitantes solo fueron un poco peores que los locales.

Mucho ha cambiado con Simeone este ‘Atleti’ y la dinámica de un equipo antes de la llegada del argentino tan deprimido para que ya gane los partidos que juega fatal, como ocurrió frente al Granada. Espeso, sin elaboración, y desconectado desde el pitido inicial, su eficacia en el remate, sin generar apenas oportunidades, resultó decisiva. Al Granada le faltó más hambre y chispa para poner en apuros a un Atlético que jugó uno de sus peores encuentros con su nuevo técnico. Sin embargo, igual que en anteriores ocasiones jugó bien y creó muchas ocasiones pero le faltó suerte en el remate y le sobraron los porteros rivales, ante el Granada marcó las dos que tuvo. Gracias a un gol de media chilena del central Miranda, en la primera llegada rojiblanca de cierto peligro, y cuando el choque ya agonizaba, por una gran jugada de Juanfran, uno de los mejores, que sentenció Falcao, aunque el colombiano estuvo ausente durante 90 minutos.