Callejón muestra el camino

José Callejón es un tesoro para el Madrid. Responde al estereotipo de perfecto actor secundario en una plantilla. Acepta su papel sin alzar la voz, se esfuerza en los entrenamientos y habla sobre el césped. Volvió a disponer de una oportunidad ante la Deportiva Ponferradina y se ganó las mejores ovaciones por su combatividad, versatilidad, ofrecimiento constante a los compañeros, sus llegadas y sus nuevos goles. Le anularon uno de forma injusta pero mostró el camino con un disparo cruzado, tras pase fantástico de Özil y buena internada. Puso el Bernabéu en pie en una vaselina que golpeó en el travesaño y cerró el partido al culminar un gran contragolpe llevado por Sahin. El motrileño ya suma nueve tantos en esta campaña y no ha perdonado en los cuatro últimos encuentros en los que ha participado.

Callejón fue la figura de un partido festivo, histórico para miles de animosos bercianos que aprovecharon el regalo del bombo copero para visitar la capital y conocer el Bernabéu. Un duelo 'prenavideño' en el que también se reivindicó el turco Sahin. Es cierto que el rival acompaaba, pero el ex del Borussia Dortmund disfrutó al fin de una noche feliz en el Madrid. Participó mucho, robó balones, marcó un buen gol de cabeza, a la salida de un córner, ofreció una asistencia genial a Callejón y al fin se sintió protagonista. Es difícil, empero, que pueda tener continuidad en partidos de mayor enjundia.

Altintop cumplió sin más como lateral derecho, Varane marcó su golito tras un rechace del portero, y Casado vivió un debut de lo más tranquilo. Mostró buenas maneras en el lateral izquierdo y tiene envergadura para ser central en caso de necesidad. Cita grande en la carrera del chaval Joselu, ya que nada más entrar en lugar de Benzema anotó a puerta vacía. Fue, curiosamente, la única acción protestada por los leoneses.

Se quejaron, y con razón, de que el Madrid sacó desde donde quiso. Tampoco se olvidará de este 20 de diciembre el portero Pacheco. A él nadie podrá hablarle de 'minutos de la basura'.

Pese a tener la eliminatoria resuelta por el buen desempeño de su equipo en El Toralín, Mourinho alineó un equipo muy competitivo, con habituales como Pepe, Khedira, Özil y Benzema en el once. El portugués volvió a tomarse muy en serio la Copa del Rey y supo trasladar ese mensaje de enorme profesionalidad a sus discípulos, conocedores de la camiseta que visten y el título que defienden.

Jugar con tensión competitiva es la mejor forma de respetar y prestigiar a un equipo humilde como la Ponferradina, a la que hay que agradecer que se presentara en el Bernabéu con grandeza. Nada de atrincherarse cerca de su área, ni de intentar cortar el ritmo del poderoso a base de faltas. Presión alta e intento de disputarle la posesión a todo un Real Madrid. Perdió pero lo hizo con dignidad y encontró el premio a su desparpajo con el buen gol de Acorán. Parecía que se le cerraban todos los caminos pero se abrió terreno para cruzarla lejos de Adán. Momento de gloria para el veterano jugador tinerfeño, jornalero del balón en equipos tan variopintos como el Corralejo, Burgos, Melilla o Puertollano, entre otros.