revueltas en el mundo árabe

La violencia continúa en Yemen por tercer día consecutivo

Al menos seis personas han muerto este martes en Saná, cuatro de ellos soldados que han desertado y respaldan a la oposición

SANÁ Actualizado: Guardar
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Al menos seis personas han muerto este martes en el tercer día consecutivo de violencia en Saná, la capital de Yemen, según han informado fuentes médicas, mientras que varios reporteros han podido ver francotiradores apostados en la parte superior de edificios mientras los manifestantes se echaban a las calles.

Cuatro soldados, que formaban parte de la brigada de Alí Mohsen que apoya a los manifestantes, han muerto en combates con fuerzas gubernamentales, según han informado médicos en el hospital de campaña instalado junto al campamento de protesta. Otras dos personas habían muero horas antes cuando al menos tres cohetes habían caído en dicho campamento.

Antes del amanecer se han producido intensos disparos de ametralladoras y artillería mientras la violencia parece estar pasando de la represión de los manifestantes a un enfrentamiento entre las tropas leales a Salé y soldados que han desertado y respaldan a la oposición.

Tres proyectiles y dos muertos

Testigos han señalado que al menos tres proyectiles impactaron en el campamento poco después de las oraciones de la mañana hacia las 5:00 horas (4:00 hora española). "Los cohetes alcanzaron a algunos hombres que caminaban frente a un mercado, hay dos muertos", ha señalado el doctor Mohamed al Qubati, director del hospital de campaña instalado en el lugar que los manifestantes han bautizado como Plaza del Cambio, precisando que también hay diez heridos.

"Estábamos volviendo de las oraciones. De repente un cohete cayó cerca llegado de la nada y algunas personas cayeron al suelo, y luego un segundo cohete y entonces fue cuando vimos dos muertos", ha relatado Manea al Matari, uno de los organizadores de las protestas.

Más de 400 personas han muerto desde que comenzaron las protestas en enero para pedir la renuncia de Salé. Al menos 56 personas murieron entre el domingo y el lunes, según médicos y testigos, después de que los manifestantes reforzaran sus protestas.