Incógnitas en torno al secuestro en Togo

El secuestro de cinco españoles pertenecientes al buque petrolero 'Mattheos I' suscita algunas incógnitas derivadas del cambio de escenario al que hasta ahora estaban acostumbradas las autoridades españoles. En vez de las aguas del Índico, próximas a Somalia, esta vez la captura se ha producido en el golfo de Guinea.

Nacionalidad del buque. El buque tiene bandera chipriota, pero es propiedad de la empresa española Naviera Consultores que presta servicios, entre ellos facilita los miembros de la tripulación o combustible, a buques y otras embarcaciones.

Objetivo de los piratas. Aunque todavía es pronto para conocer las últimas intenciones de los secuestradores, la portavoz de la naviera, Sheena Campbell, apunta a un robo más que a un secuestro con petición de rescate. En esta zona proliferan las bandas que tratan de asaltar los numerosos petroleros que transitan por la zona. La forma de actuar es a través de asaltos rápidos en los que desvalijan al buque y a sus ocupantes, haciéndose también con la carga de combustible para revenderla en el próspero mercado negro que funciona en la zona. La prensa de Togo asegura que la tripulación está retenida por un grupo de cinco o seis hombres armados que todavía no han hecho ninguna reivindicación.

Seguridad a bordo. A diferencia de lo que sucede en las costas del Índico, donde los buques españoles están autorizados a llevar agentes armados para defenderse de los abordajes, el 'Mattheos 1' carecía de ellos. Hasta ahora las autoridades españolas e internacionales no han juzgado que la peligrosidad de la zona haga necesaria esta medida, a pesar del considerable aumento de los actos de piratería. Estas aguas también están fuera de la zona de acción de la Operación Atalanta, liderada por Estados Unidos e integrada mayoritariamente por buques de guerra de la OTAN y la UE.

Estrategia a seguir. Si la pauta de actuación de los piratas es la habitual en la zona, tardarán dos o tres días en descargar la carga de combustible del buque antes de abandonarlo con su tripulación. Probablemente las autoridades españolas se darán un margen de tiempo para comprobar si esto es así antes de adoptar cualquier medida que no sea tratar de localizar y vigilar los movimientos del barco secuestrado a través de buques de otros países del área.

Posible rescate. No se puede descartar, pero de momento parece bastante improbable ya que los piratas parecen ser una banda más de la zona que ya intentó atacar antes a otro buque antes de tener éxito con el 'Mattheos 1". Para cobrar un rescate, como sucede en el Índico, es imprescindible tener un refugio seguro en la costa en el que mantener al buque y a la tripulación, además de una importante infraestructura capaz de afrontar una largo secuestro con contactos para negociar, logística para alimentar y cuidar a los rehenes, y redes para blanquear el dinero