Benedicto XVI se alojará en la Nunciatura. / Efe
El PAPA, Con los jóvenes

La Nunciatura, residencia papal

La legación apostólica, lista para acoger en su segunda planta a un huésped ilustre

MADRID Actualizado: Guardar
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Benedicto XVI convertirá la Nunciatura Apostólica en su residencia en Madrid. El edificio, situado en el noreste de la ciudad, en una zona de chalés del barrio de Chamartín, ya acogió en ocasiones anteriores al papa Juan Pablo II durante sus viajes oficiales.

La residencia del nuncio, Rezo Fratini, ya está lista para que su nuevo inquilino tome posesión de la segunda planta. La Nunciatura es un chalé rodeado de una amplia zona ajardinada, cerrada a su vez por una elevada tapia dotada de todas las medidas de seguridad. No en vano, se trata de una legación diplomática en toda regla. Para hacer más confortable las 79 horas que Benedicto permanecerá en España, el nuncio ha optado por trasladarse a otras dependencias del chalé y dejar la planta noble a su superior.

Durante las últimas semanas se han realizado obras de reforma de las instalaciones, aprovechando la llegada de tan ilustre huésped, pero de las que la Nunciatura ha optado por no dar más detalles con el argumento de que la estancia del papa en el recinto es de "índole privada". En todo caso, insistieron que el pontífice es persona de gustos y costumbres "sencillos".

La Nunciatura también albergará todo el operativo que, como jefe de Estado, el papa lleva tras de sí, no sólo en lo que se refiere al personal diplomático y oficina de comunicación, sino también para recibir, el viernes por la tarde, al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Ese mismo día Joseph Ratzinger almorzará con jóvenes de todos los continentes, entre ellos dos españoles. El sábado, Benedicto XVI recibirá allí al comité organizador de la Jornada Mundial de la Juventud y, el domingo, almorzará en la Nunciatura con los cardenales españoles y su séquito papal. Para estos encuentros existen en la planta baja varios salones, así como un gran comedor.

El pontífice también dispondrá de una capilla, donde está previsto que el viernes oficie una misa privada en la que estará el nuncio, el secretario y el consejero de la Nunciatura, seis sacerdotes y algunas hermanas residentes en edificio diplomático pertenecientes a la congregación de la Hijas de Santa María del Corazón de Jesús, que atienden las necesidades de los inquilinos del palacete. Completarán el grupo allegados y algunos amigos del papa. Además, existe otra capilla más pequeña, en la segunda planta, próxima a las habitaciones, donde el pontífice podrá retirarse a orar en privado.

Desde el exterior se aprecian estos días unos toldos desplegados sobre la amplia terraza del segundo piso. Los motivos elegidos para las telas son los colores de la bandera del Vaticano (blanco y amarillo).

Otro de los puntos donde se ha puesto más cuidado en las últimas semanas es el jardín. Se ha trabajado por arreglarlo y tenerlo a punto dado que Benedicto XVI, de 84 años, suele pasear media hora diaria.

Cordón de seguridad

En sus exteriores se ha preparado un cordón de seguridad que recorrerá todo el perímetro de la Nunciatura, donde se ha prohibido aparcar. Además, se ha fijado una zona donde está previsto que se apuesten decenas de fieles para aclamar al pontífice en sus entradas y salidas del recinto. Es más que previsible, como en anteriores ocasiones, que los fieles acudan por las noches para cantarle al papa.

La muchedumbre no molestará a los vecinos, dado que enfrente está ubicada la Escuela de Guerra Naval de la Armada y a la izquierda la Comisaría General de Policía Judicial, donde podrán disfrutar de sus momentos de asueto las Unidades de Intervención que custodiarán las inmediaciones. Tan sólo hay un edificio de viviendas a la derecha de la Nunciatura, pero separado por el jardín.