El Defensor del Pueblo abre una queja por el sector farmacéutico

El Defensor del Pueblo de Castilla-La Mancha ha informado de que ha abierto una "queja de oficio" por la situación del sector farmacéutico ante los impagos de la Junta y la amenaza de cierres puntuales de farmacias y sus consecuencias en la población.

Como encargada también de la defensa del Usuario del Sistema Sanitario de Castilla-La Mancha, esa Oficina dice que se ha dirigido al consejero de Sanidad y Asuntos Sociales "para notificarle nuestra preocupación por la posible vulneración, si llegara a materializarse el cierre de las boticas castellano-manchegas, de lo contemplado por dos leyes regionales". Ambas leyes reclaman el respeto a los derechos y deberes de los ciudadanos a obtener medicamentos y productos sanitarios y garantía de asistencia farmacéutica dentro de su ámbito territorial y en ambas se base el Defensor del Pueblo, dice, para su intervención de oficio.

La oficina del Defensor dice que ha pedido información a la Consejería pertinente, para que explique "qué tipo de actuaciones está llevando a cabo para garantizar la asistencia farmacéutica" en la región y evitar un hipotético desabastecimiento de medicamentos. También le pide información sobre "si existe o no acuerdo con las y los titulares de boticas en nuestra Región para abonarles las cantidades que se les deben".

Los farmacéuticos reclaman a la Junta una deuda de 125 millones de euros y el Gobierno regional negocia una serie de garantías financieras y un calendario de pagos. De igual forma, el Defensor del Pueblo pide al Colegio de Farmacéuticos regional "toda la información complementaria que desde ese Colegio consideren que debe tenerse en cuenta en la tramitación de esta queja".