Martelly promete que será un presidente «para todos»

El nuevo presidente de Haití, Michel Martelly, ha asegurado a los haitianos que será un presidente "para todos" y ha pedido confianza al pueblo para lograr los objetivos que se ha fijado en su mandato, al tiempo que ha prometido "respuestas concretas" a los problemas de la nación.

En un discurso pronunciado en los jardines del semiderruido Palacio Nacional ante autoridades de Haití y representantes de delegaciones internacionales, que ha sido seguido por miles de personas congregadas en el exterior, Martelly ha dicho que será "el primer servidor" de la nación. "Vamos a cambiar Haití. Vamos a rehacer este país", ha declarado con firmeza el nuevo presidente, interrumpido en varios momentos por las ovaciones del público que presenciaba la ceremonia.

También ha subrayado que es "consciente de la inmensa responsabilidad" que tiene para representar a todos los haitianos. El nuevo gobernante ha dicho que asume "con calma y serenidad" el mando de manos del presidente saliente, René Preval, de quien ha indicado que, como otros presidentes anteriores, "escribió una página de la historia".

"Pueden confiar en mi", ha enfatizado el mandatario, quien ha recalcado también que "en la unión" se verá "cómo los haitianos pueden trabajar para lograr el desarrollo del país", y les ha invitado a llevar a cabo este esfuerzo: "haitianos, supérense", ha exhortado a su pueblo.

La seguridad, eje fundamental de su presidencia

Uno de los puntos en los que ha hecho mayor hincapié ha sido el de la seguridad, que considera fundamental para el bienestar del país. "Para tener empleo hay que tener seguridad", ha aseverado. Por eso ha pedido el fin de los secuestros y ha lanzado una advertencia a los delincuentes, a quienes se ha dirigido directamente para decirles que "la justicia les va a castigar". "Basta de violencia, basta de injusticia", ha expresado el mandatario, quien ha renovado su "confianza" en las autoridades policiales y judiciales, pero les ha pedido "superarse", al tiempo que ha prometido el restablecimiento del estado de derecho.

En el ámbito de la cultura, ha abogado por el desarrollo de las capacidades del país, como la artesanía, el arte, la música, y al mismo tiempo se ha comprometido a aprovechar potencialidades naturales, como las playas y paisajes. "Haití es un país rico", ha subrayado.

También se ha comprometido a estar al lado de la juventud y a reforzar la educación y ha reafirmado su promesa de "enviar a todos los niños a la escuela rápidamente", así como de luchar para que la educación sea obligatoria, algo que figura en la constitución haitiana, pero no se cumple en la práctica. "Así es como Haití puede salir de la miseria", ha apostillado.

El nuevo gobernante ha reiterado a la nación que "realmente el país va a cambiar" y ha prometido a la comunidad internacional "un nuevo liderazgo", y una nueva nación haitiana "abierta a la paz". "Haití primero, Haití siempre...", ha enfatizado Martelly para cerrar su discurso.

A continuación ha efectuado un recorrido por el perímetro interior del jardín del palacio para acercarse al público, que le ha ovacionado y aplaudido desde el otro lado de la valla, antes de regresar junto a las autoridades e invitados para recibir nuevas felicitaciones por su investidura.