El presunto etarra Valentín Lasarte declara como testigo durante un juicio contra el exdirigente de ETA Francisco Javier García Gaztelu 'Txapote' en el año 2006. / Archivo
lucha antiterrorista

El exetarra Lasarte, trasladado a la prisión de Nanclares

Condenado a más de 370 años de cárcel por siete asesinatos, el exmiembro del 'comando Donosti' ha roto oficialmente con la banda

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El exmiembro del 'comando Donosti' de ETA Valentín Lasarte Oliden, condenado a más de 370 años de cárcel por siete asesinatos, ha sido trasladado a la cárcel de Nanclares (Álava) después de haber roto formalmente con la banda terrorista, según fuentes penitenciarias.

Lasarte Oliden, natural de San Sebastián, de 47 años, fue detenido por la Ertzaintza el 25 de marzo de 1996 cuando formaba parte del 'comando Donosti' de ETA con el que participó, entre otros atentados, en los asesinatos de los empresarios José María Olarte y José Antonio Santamaría, del brigada Mariano de Juan Santamaría, del dirigente del PP Gregorio Ordóñez, el político socialista Fernando Múgica Herzog, el sargento de la Policía Municipal Alfonso Morcillo y del policía nacional Enrique Nieto, por los que fue condenado a cientos de años de cárcel y a pagar cuantiosas indemnizaciones.

En los últimos años, Valentín Lasarte comenzó a distanciarse de ETA, por lo que a mediados de 2009 fue trasladado a la prisión de Villabona, en Asturias, donde fue uno de los dos primeros etarras en solicitar un trabajo remunerado dentro de la cárcel, algo prohibido por las directrices de la banda terrorista. Obtuvo un trabajo en el economato con una retribución de la que le descontaban una cantidad para hacer frente a las indemnizaciones pendientes.

La decisión de Lasarte y de Iñaki Rekarte, el segundo recluso que solicitó trabajo, fue muy mal acogida por la mayoría de los presos de la banda alineados con la postura oficial. Algunos de estos últimos tuvieron que ser cambiados de módulo para evitar las presiones que estaban aplicando a los dos disidentes.

Expulsado de la banda

Desde prisión, Lasarte mantuvo una relación estrecha con algunos de los cabecillas del sector crítico de los presos, como Kepa Pikabea. Su evolución llevó a los responsables penitenciarios a trasladarlo a la prisión cántabra de El Dueso, donde ha estado durante los últimos meses, antes de ser acercado a la cárcel alavesa de Nanclares. Antes de que se diera este movimiento, Lasarte rompió oficialmente con ETA y suscribió escritos de renuncia a la violencia, de reconocimiento de sus responsabilidades y petición de perdón a las víctimas.

El Colectivo de Presos de ETA incluyó a Lasarte, el 4 de enero del pasado año, en una lista de expulsados del grupo, pese a que, previamente, ya habían abandonado la organización terrorista y del propio colectivo de reclusos.