Control informático sobre más de 30 datos

La FIFA estrecha el cerco contra el blanqueo de dinero en los traspasos

A partir del 1 de octubre será obligatorio el nuevo sistema informatizado de transferencias

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La FIFA ha estrechado un poco más el cerco contra el blanqueo de dinero en los traspasos de jugadores internacionales. Y es que a partir del próximo 1 de octubre será obligatorio realizar todos los trámites mediante el sistema de correlación de transferencias del organismo (TMS en inglés), totalmente informatizado y que destierra definitivamente el engorroso papeleo.

El TMS no es nuevo. Por el contrario, el sistema comenzó a funcionar en febrero de 2008 en fase pruebas y en 18 países. Ahora ya está presente en todas las asociaciones que son miembros del organismo y en un total de 3,633 clubes. El sistema es ‘on line’ y agiliza las transferencias internacionales, haciendo más transparente su ejecución.

Los dos clubes que participen en un traspaso tendrán que introducir la misma información en el TMS; de lo contrario, se bloqueará la transferencia y las respectivas asociaciones miembro no podrán expedir el certificado de transferencia internacional (CTI). Por lo general, se deben introducir más de 30 datos por cada transferencia, entre ellos la información sobre el jugador, sobre el club, todos los pagos junto con su cuantía, su vencimiento y los datos bancarios, y los pagos de solidaridad a los clubes anteriores.

Reducir el número de traspasos de menores

A partir de ahora, todos estos datos deberán corroborarse mediante documentación acreditativa; para ello, de modo que se carguen al sistema copias digitalizadas de los documentos de identificación del jugador, de su nuevo contrato de trabajo y del contrato de transferencia celebrado entre los clubes anterior y nuevo. Por lo tanto, el sistema sustituye completamente al antiguo en formato papel. Cuando se trate de jugadores jóvenes y menores de edad, el TMS se encarga de seguir con detalle su historial. Así, el sistema puede utilizarse para certificar que las compensaciones correspondientes a los clubs que forman a los jugadores se calculan correctamente.

Asimismo, el sistema se ha adaptado para contribuir a los esfuerzos de la FIFA por reducir el número de traspasos internacionales de menores. Desde su aprobación por parte del Congreso de la FIFA en 2009, una subcomisión de la Comisión del Estatuto del Jugador debe aprobar toda transferencia de este tipo y también toda solicitud de primera inscripción de un menor en un país del cual no es ciudadano. El TMS gestionará tanto la solicitud inicial como todas las decisiones que se adopten con posterioridad.

En palabras del Presidente de la FIFA Joseph S. Blatter: "Este es un momento histórico para el fútbol. El TMS es un sistema relativamente simple, pero que tendrá una inmensa repercusión en las transferencias internacionales de jugadores. Gracias a él, las autoridades futbolísticas dispondrán de más datos sobre cualquier transferencia. Lo más importante es que este sistema aporta más transparencia a las transacciones y nos permite luchar contra el blanqueo de dinero y proteger a los jugadores menores de edad".