
Cibeles cierra con una colorida jornada
Amaya Arzuaga, Juanjo Oliva y Davidelfin protagonizan la última jornada de Cibeles con colecciones veraniegas bañadas de rojo pasión, verde eléctrico y azul Klein
MADRID Actualizado: GuardarKina Fernández fue la encargada de arrancar los desfiles de la jornada, la quinta y última de la Cibeles Madrid Fashion Week. La diseñadora gallega, que ha cedido el testigo como directora creativa a su hija María, propone una mujer hiperfemenina envuelta en gasas de seda y jacquard de rayas. La firma gallega, que presentó un 'total look' aderezado con minisombreros trilby y canotiers, apuesta por el volumen de las faldas de los años cincuenta reinterpretadas para el siglo XXI y muchos brillos, para el día y la noche. "No se puede pensar sólo en la pasarela, todo en sí, desde el zapato al sombrero tiene un sentido comercial", señala María Álvarez.
Lo mismo debe pensar Davidelfin, que mantiene su colaboración con Louboutin en el tema del calzado. El equipo Delfin-Postigo-Bosé ha traído a Cibeles su 'Tautología', que tan buena acogida tuvo hace unos días en Nueva York. Bimba Bosé abrió el desfile con un vestido azul klein, color clave de esta colección que se tiñe también de los blancos y negros marca de la casa. ¿Su osadía? Utilizar las cintas ajustables de las mochilas, en colores amarillo o verde flúor, a modo de tirantes o cinturón. En primera fila, sus incondicionales, Alaska y Mario Vaquerizo, junto a Carmen Lomana o la peletera Elena Benarroch, entre otros.
Juanjo Oliva celebra con su colección Primavera-Verano 2011 sus diez años en el mundo de la moda. 'One in other' es una revisión de todos estos años de trabajo del diseñador. "Hemos querido ver la influencia de nuestro trabajo en nuestro trabajo", explica el diseñador que ha presentado una colección muy Juanjo Oliva, teñida de naranja, verde, amarillo, rosa… Oliva devolvió por unos minutos el color intenso a la pasarela, teñida durante los días previos de colores pastel. ¿Como novedad? Ha combinado sus vestidos de crepe de China y gasas de seda con detalles de plexiglás como grandes lazadas al hombro o en forma de bolero. A continuación fue el turno de Javier Larrainzar con sus siempre correctos vestidos vaporosos ‘aderazados’ con mucho encaje.
Amaya Arzuaga dejó con ganas de más. La diseñadora burgalesa ha apostado este año por París y deja huérfana a Cibeles de una de sus mejores colecciones. El próximo martes la Galerie de Minéralogie del Museo de Historia Natural de París acogerá la presentación de la colección más conceptual de Amaya Arzuaga. Lo que ayer se pudo ver en la pasarela fue un resumen de sus líneas de ropa de calle, 'prêt-à-porter' y 'maille'. Con el inconfundible sello AA, Amaya ha incluido los estampados en su próxima colección de verano donde, por supuesto, no puede faltar el negro. Rojo pasión y rosa palo se entremezclan con kaki, humo y marino en una colección con volúmenes de campana para las faldas y cinturas marcadas. "Para mí París es lo más y hay que ir con algo único y exclusivo. No podía traer la misma colección a Cibeles", se excusaba la creadora de Lerma.
Berhanyer pone el broche de oro
Lydia Delgado también fue menos arriesgada y más comercial que en otras ocasiones. La diseñadora aprovechó su desfile para presentar su colección de joyas en colaboración con Suárez: perlas, plata, circonitas, ónix y marfil. Pañuelos 'insertados' en faldas con enormes vuelos y vestidos sirena en oro y negro son algunas de las claves de la colección.
Elio Berhanyer quien, a sus 81 años, es el diseñador más longevo todavía en activo, fue el encargado de poner el broche a cinco días de irregulares desfiles. Con su colección cocktail y noche, el cordobés vuelve a sus orígenes. "He suprimido las tallas y he vuelto a la confección a medida. Con el 'prêt-a-porter' perdimos esa relación directa con la clienta y ahora he querido volver al trato personal de la alta costura", cuenta el diseñador entre bambalinas. Entre vestidos cortos, muy cortos, y gasas estampadas destacaron cuatro prendas con grandes rostros de felinos pintados a mano: lince ibérico, león, tigre y guepardo. "He querido hacer un homenaje a los felinos que están en peligro de extinción", confiesa el diseñador, amante de estos animales.