opinión

¿Dónde está el dinero de Alestis?

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La elaboración de un plan estratégico para salvar la compañía aeronáutica Alestis ha desvelado la existencia de un agujero millonario, que pone en entredicho la gestión de esta empresa semipública y arroja serias dudas sobre el destino que ha llevado el dinero enterrado en ella a través de subvenciones, incentivos y préstamos.

Alestis Aerospace nació en 2009 gracias al impulso de la Junta de Andalucía. La Administración regional quería convertir el eje Cádiz-Sevilla en el nuevo polo aeronáutico de España y presentar con ello una empresa de primera magnitud para convertirse en proveedor principal (Tier 1) de las grandes industrias del sector, en este caso de Airbus.

Con esta actuación, la Junta mataba dos pájaros de un tiro. Por un lado, potenciaba la creación de una gran compañía aeronáutica y, por otro, reinsertaba en el mercado laboral a 349 extrabajadores de Delphi. Sin embargo, la empresa que estaba llamada a ser el gran referente de la industria aeronáutica andaluza ha sido un auténtico fiasco.

Para la creación de Alestis fue necesario contar con un socio que aportara la infraestructura y los conocimientos de la construcción aeronáutica. Desde el primer momento, el Gobierno regional, en manos entonces de Manuel Chaves, se negó a que la compañía estuviera pilotada por empresarios de otros sectores. De esta forma, se buscó la alianza del grupo vasco Alcor que, gracias a la fusión de Sacesa, la otra sociedad aeronáutica andaluza, aportó la infraestructura necesaria para alumbrar Alestis. Este grupo vasco representa en el Consejo de Administración de Alestis el 42,1% y es el socio mayoritario. La Junta, con el 19%, es el segundo accionista y el resto, se lo reparten Unicaja, La Caixa y el Banco Europeo de Finanzas, además de una mínima participación que corresponde a EADS.

Su nacimiento vino con un pan debajo del brazo. Airbus le adjudicó dos importantes contratos para la construcción de su nuevo modelo de avión civil, el A350. A partir de ese instante, la Junta se volcó con Alestis y en solo dos años le inyectó 57 millones de euros en ayudas públicas. Una de las mayores aportaciones fueron los 31 millones que desembolsó para fomentar la contratación en Alestis de 349 extrabajadores de Delphi. Las diferencias entre el director general del Grupo Alcor, Gaizka Grajales, y el principal cliente de la compañía, el gigante Airbus, han sido otra gota más en la nefasta gestión de esta empresa que se ha construido a golpe de subvenciones públicas. A mediados de 2011, Airbus decidió intervenir en Alestis ante el peligro que corrían sus encargos.

Finalmente, el plan de viabilidad, diseñado precisamente por técnicos de Airbus destacados en Alestis, ha puesto a cada uno en su sitio y arroja, al mismo tiempo, ciertas interrogantes. Alestis ha presentado un ERE para 312 trabajadores y cabe preguntarse ahora para qué se dieron entonces 31 millones de euros de dinero público para el fomento de la contratación. Tanto dinero público no ha servido para librar a Alestis del concurso de acreedores.