Oda a Xavi e Iniesta

Juan Merino aún le da vueltas a la cabeza. El entrenador azulino sigue buscando las razones por las que el equipo perdió dos puntos ante el Celta. En declaraciones a la Cadena Cope, el técnico del Xerez reconoce que se siente aún «dolido» tras el empate ante el Celta y que seguía «dándole vueltas a la situación que sufrimos en los últimos minutos. Estoy más tranquilo, pero seguro que el enfado me durará hasta el míercoles». El linense intentaba argumentar lo sucedido, destacando que «por ocasiones y por el saber estar acabé el partido muy contento, jugamos bastante bien y las sensaciones fueron buenas ante un equipo que se puso por delante en el marcador, pero en los últimos minutos el equipo le dejó al Celta que llevara el peso del partido por lo que hay que seguir creciendo como equipo más aún».

Pero la principal razón encontrada por Merino tiene nombre, dos en este caso: Capi y José Manuel Rueda. Merino los comparó no una, sino hasta en tres ocasiones con dos jugones como Xavi e Iniesta. «Que Capi nos dé 70 minutos buenos es muy importante para nosotros», espeta el míster, quien asegura que «Xavi e Iniesta son jugadores muy importantes para el Barcelona y si no están no juega igual el equipo, pues para mí Capi y Rueda significan eso. No lo digo yo, sino los propios jugadores en el terreno de juego».

En cuanto a la polémica con Capdevila, que desquició a Merino en el tramo final, el técnico asegura que «anoto y reacciono al respecto. El jugador se gana las cosas en el terreno de juego y soy el responsable de elegir los jugadores que tienen que jugar. Me dolieron ciertas cosas como entrenador»

Para acabar, el entrenador del Xerez reconoce que no convocó a Barber por culpa de los silbidos que recibió el valenciano en el anterior encuentro casero: «Es un hombre que va a ser importante en el equipo. En casa solía prescindir de un central y en esta ocasión opté por lo contrario, pero ayer era un partido para poner a un hombre como Barber. Pero teniendo en cuenta su situación, que cuando entra se notan algunos silbidos, cosa que a mí no me pesa, pues miro lo mejor para el equipo. Yo le dije que esa situación la vamos a arreglar entre todos con buen juego, convirtiendo los pitos en alabanzas. Él es un hombre de mucho sentimiento y encaja bien los golpes, pero creo que necesita su tiempo y para este partido no lo tenía».