el tranvía

Asumir responsabilidades

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Gusta que otros se pongan en nuestro lugar cuando lo pasamos mal. Que entiendan por qué sufrimos en un momento dado, por ejemplo, aunque no necesariamente tengamos que recibir consuelo por ello. Basta con que nos entiendan. O al menos eso es lo que suele pasarle a muchos, entre los que me incluyo. Pero tampoco está de más que practiquemos ese mismo ejercicio nosotros cuando analizamos un problema o una situación desagradable que no nos afecta directamente pero sí nos interesa o nos pilla más o menos cerca. Me explico.

Intento ponerme en el pellejo del gobierno local tras las complicadas decisiones anunciadas en los últimos días. Mi postura ante los recortes ya quedó plasmada en un artículo anterior, así que toca centrarme esta vez en la determinación de denunciar ante Fiscalía la gestión de Onda Jerez llevada a cabo por la anterior alcaldesa, Pilar Sánchez, paso que arrastrará también a Pedro Rollán, quien fuese director-gerente de la radiotelevisión municipal en los últimos años y que ahora se ha sabido que también ha denunciado al Ayuntamiento por posible despido improcedente. Estoy seguro de que la primera edil, María José García-Pelayo, y su equipo lo han meditado suficientemente y que han calibrado las consecuencias que esto puede suponer: poner en marcha otro proceso judicial con todo lo que eso conlleva, crispar todavía más los ánimos políticos en una ciudad convulsa...

Pero la política está para tomar en ocasiones decisiones de este tipo. Lo que no es de recibo es que los políticos pasen por la vida pública de rositas, sin asumir las responsabilidades de una mala gestión –en caso de que la haya, por supuesto– y de que el derroche quede impune como suele suceder. Porque los que acaban pagándolo ya se sabe quiénes son:los que menos culpa tienen, casi siempre ciudadanos. Y en este caso, unos trabajadores que cierto es que tampoco tienen la culpa de esa mala gestión o de una política de contrataciones caracterizada por los excesos.

Onda Jerez es una ruina para las arcas municipales. Eso nadie lo discute. Ahí están las cifras y unas pérdidas millonarias ejercicio tras ejercicio. Y no puede seguir siendo así. Eso tampoco debería discutirse. Tampoco creo que los empleados de la radiotelevisión municipal sean quienes tengan que pagar las consecuencias. No se lo merecen. Pero sí deben responder quienes tengan culpa de que la situación haya llegado a este punto, se llame Pilar Sánchez, Pedro Rollán o Perico de los Palotes.

Por cierto, quizá eso mismo, lo de pedir responsabilidades por la gestión de Onda Jerez, podría hacerse con el Ayuntamiento en general y quienes lo han gobernado en el pasado. Todos. Sin excepción. Y quienes lo hayan hecho mal, quienes hayan despilfarrado, que paguen por ello. Porque alguien debe tener la culpa de lo que está pasando, ¿no?