'OT' recupera la mala leche

Van a necesitar todo un orfeón los chicos de ‘Operación Triunfo’ para hacerse oír. A la tercera no fue la vencida, sino más de lo mismo. ‘OT’ reunió el domingo a una audiencia pelín raquítica, 2,2 millones de espectadores que hicieron un ‘share’ del 12,7%. Los datos no son una birria, pero resultan pobres para un programa con tantas pretensiones y tan buenos precedentes como éste, que llegó a anotar cifras de récord: casi 13 millones en la emisión más vista y un 68% de cuota de pantalla (la final de la primera edición, cuando se emitía en TVE) y 2,5 millones de fieles en la última entrega, con Jesús Vázquez al frente.

Lloraba Pilar Rubio el domingo con la marcha de Charlie, uno de los concursantes. Pero no fue el único que se despidió. Fernando Argenta, el para siempre presentador de ‘El Conciertazo’ (La 2) y el juez menos implacable de la historia de ‘OT’, cedía su asiento a un viejo conocido de la academia televisiva, Ángel Llácer. Con la marcha de uno y el regreso del otro, el programa recupera el perfil más duro.

Dice Argenta que se va por motivos profesionales. «Yo tenía previsto faltar a una gala por un concierto, pero en estas semanas me han salido otros dos compromisos. Sustituirme una vez no les importaba, pero entendí que tres veces ya les fastidiaba, así que les dije: ‘tranquilos, me voy’. Yo creo que se sintieron aliviados porque no les apetecía hacer tantos cambios». El músico no siente alivio «porque ‘OT’ no era una carga». Todo lo contrario. En una entrevista concedida a este periódico hace unos días Argenta se confesaba encantado con su encargo en Telecinco, un trabajo, advertía, que no había aceptado por dinero: «Yo estoy de manera casi altruista. Cualquier concierto que hago incluso en estos momentos de crisis me da más dinero que esto». Aceptó porque lejos de convencerle con un cheque lo hicieron con palabras: «Me dijeron que tenían la intención de cambiar la imagen del programa, que yo daba el perfil y que podía aportar un sesgo distinto y a mí se me gana así».

¿Volverá Rafa Sánchez?

Ha durado tres programas y con su marcha los concursantes quedan a merced de un jurado más cañero que critica sin contemplaciones. A Noemí Galera y Eva Perales se ha unido el recambio de Argenta, Ángel Llácer. Así que ya no hay ‘poli bueno’ en la cuadrilla. Porque Llácer tiene toda la pinta de venir en plan de juez duro, incluso borde –aunque sin llegar al extremo de Risto Mejide–. Garantiza Argenta que su sustituto «no llega para dar mandoblazos» pero no ahorró ‘vehemencia’ en el estreno: «Tienes un problema, eres la ciega de ‘OT’ y a mí eso me molesta», le dijo sin ánimo de ofender a Coraluna. La cuarta pata del jurado, Rafa Sánchez (‘La Unión’), no fue el domingo a trabajar, aunque desde Telecinco no aclaran si su ausencia será temporal o definitiva.

Así que ya son dos las incógnitas. Una, cómo quedará el jurado. La otra, qué hará la audiencia. La octava edición de ‘OT’ se estrenó con 2,7 millones de espectadores, pero perdió medio millón en una semana. El último domingo quedó igual que el anterior, con el bronce en la carrera del ‘prime time’. La película sin anuncios de TVE y la serie ‘Los Protegidos’ de Antena 3 le llevan varias leguas a los chicos de ‘Operación Triunfo’. O, lo que es lo mismo, le aventajan en un millón de espectadores. Dulce melodía en comparación con una ‘OT’ desafinada.