La refriega deja cuatro heridos, dos de ellos agentes, y un detenido

Cuatro heridos, varios contusionados y un detenido. Este es el parte de guerra de la breve batalla campal que tuvo lugar ayer en el centro de la ciudad, protagonizada entre los ex trabajadores de Delphi y los efectivos policiales. Dos de los afectados eran agentes de la brigada de seguridad, que resultaron también con lesiones y precisaron atención facultativa.

Los sindicatos han rechazado la actuación policial, mientras que el PP ha pedido explicaciones por lo ocurrido. Durante la pugna resultó herido en la parte derecha de la cabeza uno de los participantes en la manifestación, que fue asistido por los servicios sanitarios. Se trata de un ex trabajador que recibió el impacto de una pelota de goma en el ojo. Los compañeros procedieron a sacarlo de la refriega. El trabajador fue ingresado en el hospital Puerta del Mar donde se le practicó un TAC para comprobar el alcance de la herida. Se le apreció un fractura, aunque no se teme por la pérdida del globo ocular.

La única detención se produjo antes de mediodía. Un individuo vestido con un chaquetón, y las facciones cubiertas por una braga de montañero de color negro, salió de entre un nutrido grupo de manifestantes que ocupaba la esquina de la calle Torre con la plaza de San Antonio. Según la versión de la Policía, el hombre lanzó un adoquín contra la luna delantera de unos de los vehículos policiales que se encontraba en la zona.

Emprendió la fuga por la calle Torre, perseguido por varios agentes, hasta llegar a la confluencia de las calles Zaragoza y Cervantes, donde un agente motorizado de la Policía Local permanecía regulando el tránsito. Pasó por delante de la motocicleta policial y posteriormente se giró y la volcó.

La huida siguió por Sagasta, Ancha, Novena, Palillero y Columela, donde fue alcanzado por varios agentes ofreciendo gran resistencia a su detención. Esta persona fue trasladada a la Comisaría Provincial donde se le identificó como a O.M.C. de 46 años de edad, natural de Baracaldo (Vizcaya) y domiciliado en Puerto Real.

Las movilizaciones de los ex Delphi comenzaron a mediados de noviembre cuando la Junta anunció que no podía seguir con los compromisos firmados en julio de 2007. Este acuerdo garantizaba a la plantilla su recolocación y la protección social, mediante una beca de formación y transporte. Tres años después, el Gobierno regional alega problemas económicos para romper con el acuerdo y reconoce la imposibilidad de recolocar a todos.