Saquean un antiguo palacete para vender lo robado en anticuarios

Agentes del Grupo de Delitos contra el Patrimonio de la Policía Nacional han logrado completar una importante operación con éxito y, gracias a la misma, recuperar efectos de un elevado valor histórico-artístico de los siglos XV y XVII que, según se apunta, fueron robados del interior del Palacio San Blas, conocido familiarmente en la ciudad como el Palacio de El Pantera. Fuentes del cuerpo señalan que ha sido posible tras «unas difíciles y rocambolescas gestiones e investigaciones».

Entre los efectos recuperados se encuentran la puerta de acceso -de madera del siglo XVII-, dos pozos de mármol del XVII, rejas y un balcón de hierro forjado, terrazas de cerámica, radiadores, barandillas de ébano macizo y numerosos metros de azulejos de cerámica. Son efectos valorados en mas de 74.000 euros.

Los detenidos

La actuación policial se ha saldado también con la detención de tres personas presuntamente autoras del robo. Sus identidades responden a las iniciales FJ.G.C, de 25 años de edad y sin antecedentes policiales; G.T.D, de 46 años y con antecedentes, y J.M.C.C, de 45 años y sin antecedentes. Los dos primeros han sido imputados de los presuntos delitos de robo con fuerza y estafa, mientras que el tercero de ellos lo ha sido de uno de estafa.

La Policía Nacional destaca que la colaboración ciudadana ha resultado nuevamente determinante en la resolución favorable de este caso, sobre todo en lo momentos en los que la investigación se presentó «especial dificultad».

El complicado trabajo de los agentes llegó a buen puerto también gracias a que pudieron determinar que los ahora detenidos habían llegado a contactar con un anticuario de Jerez, quien a su vez facilitó un posterior contacto con un anticuario de la ciudad malagueña de Ronda.

Pero no pudieron acabar colocando la mercancía porque la intervención policial se produjo antes de ello, para satisfacción de los propietarios de estos importantes efectos.

Finalmente, una vez concluidas todas las diligencias y atestados pertinentes, la propia Policía Judicial procedió a la presentación de los presuntos autores de los hechos narrados ante la autoridad judicial competente en funciones de guardia. Y es a ésta a la que corresponde ahora qué hacer con los detenidos que, en cualquier caso, deberán responder de las mencionadas acusaciones de robo con fuerza y estafa.