Limpieza del recinto ferial.
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La Feria contó con una menor afluencia pero con un mayor consumo

Puerto Real Actualizado: Guardar
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"La afluencia de este año a la Feria, aun siendo importante, ha sido menor que otros años, pero con un mayor consumo". Estas palabras pronunciadas por el responsable municipal de Infraestructuras, José María Martín Torres, constatan una percepción en la mente de todos, aunque pendiente de un indicador que lo certificara. Para ello, Martín Torres echa mano de un dato curioso: la cantidad de residuos que genera la fiesta. "Con un menor número de ciudadanos, se han recogido 64.000 kilos de basura", compara por ejemplo con los 80.000 retirados en el caso del año pasado.

Quien se ocupa de una parte más estética, el concejal de Fiestas Salvador Catalán, refrendaba la sensación. En su caso se apoyaba en las opiniones de los caseteros, quienes transmiten que sus números "se han salvado por las comidas, porque en las bebidas han bajado mucho". Este descenso se adjudica al botellón 'de portada para adentro', al que este año se han acogido incluso personas de mediana edad.

Más allá de cifras anécdóticas, Catalán se ha mostrado "satisfecho" por el desarrollo de la Feria. Reconoce de todos modos algunas "dificultades", como la propia crisis económica, la coincidencia con otras tres citas festivas o las generadas por el acceso a través de las pasarelas peatonales y por la reducción de los aparcamientos ante la inclinación de muchos hacia elegir el coche antes que venir a pie hasta el real.

A pesar de este reconocimiento, su compañero de Infraestructuras criticaba las dudas previas a la fiesta lanzadas por algunos colectivos en torno a la estabilidad de los pasos elevados. "Contra la opinión de algunos agoreros, las pasarelas han pasado su prueba de fuego, y la han superado con creces", defendió Martín Torres, quien avaló que dichas instalaciones "se han usado incluso más de lo que se preveía".

En el capítulo de felicitaciones, Salvador Catalán es especialmente efusivo con los caseteros. "Después de bastantes reuniones para conseguir una feria más tradicional, se ha hecho visible con unas casetas más homogéneas, con una mejor estética y presencia", se felicitó.

El representante municipal mantuvo en la tarde del lunes una reunión de balance con el colectivo. Sobre la mesa se puso una posible reestructuración del recinto ferial. Catalán asume que el actual "se ha quedado pequeño", por lo que se afrontará un estudio para valorar una nueva configuración. Muchos defienden el agrupamiento de las casetas jóvenes por un lado y las clásicas por otro, extremo sobre el que el edil adelanta que "será difícil, porque se pondrían en juego sitios históricos, así como los más rentables".

Además de conseguir que suene música "más tradicional" y que se reduzca un volumen "que ahora es excesivo", Catalán incluye en la parte negativa el 'botellón', que según asume "está proliferando en el recinto ferial". De todos modos, el edil de Fiestas aseguró que "se está trabajando para disminuirlo, y ya se barajan algunas fórmulas para atajarlo". A este respecto, reclamó la colaboración de las propias casetas.