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EE UU disuade a quienes tratan de llegar a su costa

WASHINGTON. Actualizado: Guardar
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El Ejército de Estados Unidos ha desembarcado en masa en Haití, pero los haitianos pueden hacer lo propio en territorio norteamericano. Ante el temor de que ello ocurra, un avión de la Fuerza Aérea provisto de una emisora de radio difunde desde ayer mensajes a la población de la isla para instarles a no intentar huir del país por barco hacia el gigante del norte, advirtiéndoles de que serán interceptados y devueltos.

La grabación utiliza la voz del embajador haitiano en Washington y anuncia asimismo los lugares a los que las víctimas pueden acudir en busca de alimentos y ayuda. «Escuchad, no os apresuréis a subiros a embarcaciones para abandonar el país», afirma Raymond Joseph en creole. «Si lo hacéis, tendremos problemas incluso peores porque. Seré sincero con vosotros, si pensáis que llegaréis a Estados Unidos y que todas las puertas estarán abiertas, ése no será el caso».

Entretanto, Guantánamo se prepara para recibir si es necesario a damnificados, según reveló ayer una portavoz militar en la base naval en territorio de Cuba. La mayor Diana Hayne aseguró en declaraciones a la cadena de televisión CNN que las fuerzas se disponen a recibir un posible flujo de haitianos que huyen de la destrucción.

Agregó que la base ya ha instalado alrededor de cien tiendas de campaña, cada una de las cuales cuenta con diez camas y también hay servicios sanitarios. El cuartel se ha convertido en un importante centro de los esfuerzos de ayuda estadounidense para Haití a través del envío de agua potable y alimentos. Además, según el general Douglas Fraser, comandante del Mando Sur, la Marina ha establecido allí un centro logístico para dar a apoyo a los barcos de Estados Unidos que se encuentran en la región marítima.

Por otra parte, el Congreso norteamericano envió ayer a Barack Obama una ley que permitirá a los estadounidenses deducir de sus declaraciones de impuestos de 2009 las donaciones que hagan para los esfuerzos humanitarios en Haití.