Sociedad

De importancia capital

MADRID Actualizado: Guardar
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Es sabido que los españoles piden a sus parejas que sean familiares e inteligentes, que luzcan cabellera preferentemente morena y que traigan consigo una suegra poco militante, mucho sentido del humor y, puestos a pedir, un Audi A-4. Pero, ¿qué esperan de su ciudad?

Pues casi lo mismo que de su compañero de alcoba: que les cuide, que sea de fiar, trabajadora, aseada, amable, educada, divertida y saludable, también un poco verde... que se encuentre bien situada y facilite la comunicación, que cree buen clima y, por qué no, que esté de buen ver. No es la carta a los Reyes Magos: son las conclusiones del informe Merco Ciudad 2009.

Además de clasificar los núcleos urbanos por su reputación, la calidad de su oferta educativa o de ocio, el macro estudio elaborado por los consultores Villafañe & Asociados pregunta a los ciudadanos por los aspectos a los que dan más importancia a la hora de juzgar su lugar de residencia. Lo tienen claro: antes de nada, sitúan a la salud. Tome nota quién corresponda.

Según los 9.000 encuestados, todos mayores de 16 años y residentes en poblaciones de más de 100.000 habitantes, lo más valorado de cualquier localidad es su sanidad (9,56), seguida de la seguridad (9,41), su oferta de empleo (9,34), la amabilidad (9,22), la educación (9,20), la gestión pública (9,16), los transportes (9,14), la limpieza (9,11), la contaminación (9,07), la existencia de una mentalidad abierta (9), las comunicaciones (8,91), el nivel de precios (8,77) y el tráfico (8,67).

Ahora bien, como ocurre también con el amor, uno no siempre encuentra ni a su media naranja ni el paraíso de sus sueños. De hecho, Merco Ciudad refleja un importante desfase entre lo que la sociedad demanda y valora y lo que en la práctica ofrecen las urbes. Concretamente, en lo que más defraudados se sienten los urbanitas preguntados es en sus expectativas laborales. Pese a que la oferta laboral es su segunda prioridad, puntúan el nivel de satisfacción obtenido en un escuálido 4,91. Suspenso.

Suspenso en gestión

La polución y los atascos también figuran entre las asignaturas pendientes y desquiciantes, igual que la gestión política y la seguridad. Los electores no se muestran muy contentos con sus alcaldes y concejales. Temen que les quiten el dinero, si no sus gestores a base de tasas, los ladrones de oficio a base de tirones o atracos: subrayan que no se encuentran todo lo tranquilos que desean paseando por sus calles, que, dicho sea de paso, también podrían lucir más limpias y esforzarse por resultar un poco más amables.

Menor diferencia entre importancia dada y satisfacción recibida se constata en relación con el clima, la oferta de entretenimiento, el atractivo y la ubicación de la localidad. No obstante, sólo la oferta comercial está por encima, y sólo una décima, de lo que piden los ciudadanos. Tampoco es de extrañar que baste con las tiendas existentes, cuando lo que parece que más se lleva hoy día en cualquier ciudad es la crisis. Fea moda, por cierto, que dura ya varias temporadas.