Ciudadanos

Las clínicas privadas mantienen a sus asegurados pero frenan la expansión

CÁDIZ Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Lo último es el médico. Las clínicas privadas de la provincia sobreviven en tiempo de crisis. No crecen, pero tampoco menguan. La coyuntura económica no ha afectado demasiado a la cartera de pacientes, pero sí ha paralizado proyectos. Ése es el caso de la urbanización Novo Sancti Petri de Chiclana, donde se iba a instalar un segundo centro médico, pero el concurso público quedó desierto ante la falta de inversores.

Las áreas que mejor aguantan son Pediatría, Ginecología y Odontología. Los pacientes son fieles a sus especialistas y les cuesta prescindir de este servicio para pasar al sistema público. Las largas esperas y el trato son las principales armas de las clínicas privadas, que cuentan con gran tradición en la provincia.

Las más nuevas, como el centro Astarté de Cádiz, tampoco han visto mermar su lista de clientes. Su gerente, Juan Otero, asegura que no se han visto afectados. «Hemos notado un descenso de las consultas de Cirugía Plástica de aquellos pacientes que llegaban indecisos», reconoce, pero en el resto de servicios se mantienen los mismos. «Tampoco han bajado los que llegan derivados de mutuas y seguros médicos», insiste Otero. En lo que sí les perjudica la coyuntura económica es en los nuevos proyectos. Astarté pretende instalar un sistema telemático para consultas por Internet que de momento se encuentra paralizado. También la creación de nuevas áreas dependientes de su centro en otras ubicaciones, que seguirán siendo sólo una idea más hasta que no amaine el temporal.