Feijóo reconoce que la grabación a Camps «no es para estar contento» pero insta a «aclarar qué es lo que hay»

El presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado, un día después de la publicación de las conversaciones del presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, con Álvaro Pérez, 'El Bigotes', implicados en la 'Operación Gürtel', que «estamos de acuerdo que no es para estar contento» pero insiste en que lo que hay que hacer es "aclarar con intensidad qué es lo que hay, qué es lo que ocurre, con independencia de quién sea el afectado, en este caso un compañero de partido, en otros casos un adversario político".

Desde el Gobierno, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, ha considerado que la conversación entre Camps y 'El Bigotes' conocida por la prensa, resulta "poco edificante" y "exige alguna explicación".

En una entrevista en la Cadena Ser, Núñez Feijóo ha señalado que había hablado con el presidente de la Generalitat valenciana y que quiere que haya "un juicio justo y no un juicio paralelo". Así, dijo que Camps espera que el Tribunal Superior de Justicia de Valencia actúe y llegue "hasta los más profundo en un Estado de Derecho para averiguar los hechos y ver la trascendencia jurídica de los hechos que se imputan".

El dirigente popular gallego ha calificado de grave que la honorabilidad del presidente de la Generalitat se haya puesto en duda como "consecuencia de las actuaciones de un pillo". "Si un pillo se ha beneficiado de determinados 'negocietes' y, además, lo que se pretende ahora es inculpar a personas que, de momento, no han tenido una sola mancha en su expediente me parece doblemente grave puesto que por estas concesiones se está hablando de la honorabilidad del presidente de una Comunidad Autónoma".

Informaciones apabullantes

Por su parte, De la Vega reconoce que las informaciones periodísticas que están apareciendo en las últimas semanas sobre la supuesta trama de corrupción que afecta a cargos del PP, resultan "apabullantes" aunque ha dejado claro que el Gobierno no se pronunciará "por prudencia" hasta que no lo hagan los tribunales.

No obstante, ha calificado de "sencillamente penoso y hasta insultante a la inteligencia de la inmensa mayoría de los españoles" que Mariano Rajoy, "ponga los listones morales o éticos" en función de si Camps recibió como regalo "muchos o pocos trajes".