Todos los grupos coinciden en sus críticas al Gobierno por la gestión de la retirada de Kosovo

La soledad parlamentaria del Gobierno ha quedado patente en el maratoniano pleno del Congreso, primero, y en la sesión de control, después. Aunque la comparecencia de primera hora de la mañana estaba programada para que Zapatero hablara sobre el Consejo Europeo de la semana pasada, tanto Rajoy como el resto de portavoces parlamentarios han sacado a colación la polémica por la retirada del contingente español de Kosovo. Según el presidente del PP, se ha realizado de forma "catastrófica" y con el objetivo, por parte de la ministra de Defensa, de "salir en el telediario".

El presidente del Gobierno ha reprochado al líder del PP la falta de apoyo de su partido al Ejecutivo ante la polémica suscitada por la retirada y ha recordado que cuando se produjo la crisis "surrealista" de Perejil él sí apoyó al Gobierno de José María Aznar pese a que la invasión fue producto de "la mala política" hacia Marruecos. Ante los ataques del jefe de la oposición, Zapatero ha defendido la política exterior de su Gobierno, cuyo "buen hacer y la confianza que genera" permitirán que no haya "ninguna consecuencia" de esta retirada, y la ha comparado con la del PP, cuyos dos hechos más remarcables, a su juicio, son la "guerra ilegal" de Irak y la "gran hazaña de Perejil".

La respuesta de Rajoy no se ha hecho esperar y ha acusado a Zapatero de haberse "convertido en una estatua de sal" por volver a sacar el tema de Irak y "así nos va". "¿Qué quiere decir con lo que ha dicho sobre el asunto de Perejil? ¿Qué pasa si alguien invade territorio español? Me gustaría saber cuál es la posición que mantendría en ese caso el presidente de España", añadía, en medio de los aplausos de su grupo. Zapatero no ha respondido a la pregunta pero ha considerado que lo ocurrido fue "fruto de una mala política exterior" por parte del Gobierno popular y "rayó lo surrealista en unas relaciones de vecindad con Marruecos".

Centrado el debate en la retirada de Kosovo, Rajoy ha insistido en sus críticas y ha apuntado que la actuación del Gobierno ha sido "lamentable para la credibilidad de España en Europa y ante los socios de la Alianza". El líder popular ha lamentado que cuando su partido pidió al Gobierno la retirada de Kosovo, la respuesta fue "que no era el momento" y que Zapatero aunque tenía "razón en el fondo ha perdido las formas".

Todos los grupos secundan las críticas

Esta vez el PP no se ha quedado solo en las críticas. El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, ha asegurado que su partido no se ha sentido "defraudado" por la "chapucera" gestión que ha hecho el Gobierno de la retirada de Kosovo porque ya sabía que el Ejecutivo es "poco fiable" y por tanto ya lo estaba. El diputado peneuvista ha lamentado que la decisión española haya provocado decepción y sorpresa en Estados Unidos ahora que con Barack Obama se abría "un prometedor futuro de colaboración y apoyo mutuo". Sin embargo, decía, "ese no es nuestro caso". Al PNV, ha afirmado, "esta chapucera gestión ni nos ha sorprendido ni nos ha decepcionado". Según el portavoz vasco, a su partido no le ha "sorprendido porque conocíamos el gusto que este Gobierno tiene por la improvisación y la humorada".

El representante de ERC Joan Ridao ha apuntado que la decisión de la retirada convierte a España en un "socio poco fiable" en el concierto internacional y demuestra que Zapatero "no tiene política exterior" además de que en su Gobierno "no se sabe quién manda" en diplomacia. Para Ridao, la decisión del repliegue obedece exclusivamente a razones "puramente ideológicas" y responde al "miedo" al "posible contagio" de la independencia de Kosovo "al Estado español". El portavoz republicano ha denunciado que Zapatero esté "más cerca" del primer ministro ruso, Vladimir Putin, que de la canciller alemana, Angela Merkel, "más cerca de Moscú que de Bruselas y Washington" sólo por cuestiones ideológicos y por los "compromisos energéticos" que su Gobierno adquirió con Rusia durante la reciente visita a España del presidente Dimitri Medvedev.

El portavoz de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, ha cargado contra lo precipitado de la decisión y ha recordado que cuando se participa en organizaciones y misiones compartidas "lo lógico, serio y eficaz" es "compartir" las decisiones. En representación de IU-ICV, Gaspar Llamazares, se ha mostrado de acuerdo con la retirada pero ha criticado que la decisión no se llevara en primer lugar al Congreso, mientras que el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, ha indicado que su partido no está de acuerdo con sacar las tropas de Kosovo para llevarlas a Afganistán.