La plantilla no descarta parar la pretemporada y dejar de entrenar

La situación sigue empeorando en el Xerez Deportivo. Acaba una semana más y siguen sin soluciones los problemas económicos e institucionales de la entidad jerezana. La parcela deportiva está prácticamente paralizada, pues en la secretaría técnica Miguel Ángel Rondán no es capaz de convencer a ningún futbolista para que fiche por un equipo que no sabe si el año que viene estará en Segunda División, y en los campos de entrenamiento la plantilla ha decidido no iniciar la concentración. Es más, salta al prado, pero prácticamente no entrena. Ayer se pudo ver que el grueso del plante ha crecido con las incorporaciones de Aythami, Álex Bergantiños, Pedro Ríos y Porato, pero prácticamente no se ejercitaron. El grupo se limitó ha realizar un poco de carrera continua y a hacer algunos ejercicios de estiramientos.

Los jugadores ya están muy cansados de esta situación y por ello prefieren no hacer declaraciones públicas. Por ello, otra vez, Vicente Moreno dio un paso al frente para explicar las últimas decisiones tomadas por la plantilla. Prácticamente, no tuvo que recordar los motivos porque «todo el mundo sabe cómo está la situación. Tampoco puedo aportar nada nuevo. Los problemas son los que son y seguramente no tenga mucho sentido ir a ninguna concentración, pues conlleva un gasto económico. Si no hay dinero, no hay dinero». Ante este desolador panorama «nosotros ponemos estos argumentos encima de la mesa y luego se suspende la concentración. Tampoco es que se haya dicho que había que estar allí y no hemos aparecido. Simplemente se ha argumentado y luego se ha suspendido». Y es que según explica el capitán del Deportivo, la decisión de suspender la concentración en Montecastillo ha sido una decisión que ha tomado el club. «Nuestra idea y nuestro argumento es que no se debe ir, pues si no hay dinero, no hay dinero para nada. Tampoco debe haber dinero para una concentración. Nosotros lo argumentamos y se decide suspenderlo. Al final el que lo suspende es el club».

También quedó suspendido el entrenamiento de ayer por la tarde, y no habría que descartar que la plantilla decidiera dejar de entrenar hasta que se resuelva el futuro inmediato de la entidad, pues Vicente reconocía que «las ganas son de no entrenar. Hablamos con sinceridad. No por que uno no quiera, a lo mejor me he expresado mal, básicamente es que el cuerpo no te acompaña. No estás en las mejores condiciones de entrenar. Me imagino que hoy (por ayer) habréis visto el entrenamiento, el cuerpo no acompaña y psicológicamente no estamos en las mejores condiciones para ejercitarnos como debiéramos. Esto está dando muchos giros y no me atrevo a decir nada. Hoy hemos salido ahí, hemos hecho lo que hemos podido, en principio no esta tarde no entrenamos y no sé qué pasará mañana (por hoy). No me atrevo a decir cómo va a seguir esto. Siempre parece que no puede pasar más y siempre acaba pasando». Por ello, ni tan siquiera se atreve a levantar la vista, pues afirma que no sabe «si vamos a tomar más medidas. Para que voy a decir que no y luego va a ser que sí. No te puedes comprometer a nada. Iremos viendo un poco».

Más nerviosismo

A medida que se restan horas para ponerle solución al asunto, crece el temor. Es más, «el nerviosismo se va multiplicando hasta que lleguemos al día 31. Hoy claro que hay más que ayer, más nerviosismo y más malestar».

La afición del Xerez anunció a mediados de semana que no descartaba realizar movilizaciones, por ello el capitán del equipo piensa que «todo el mundo es consciente. Uno puede pensar más o menos en ello, le puede ir más o menos, pero creo que todo el mundo sabe la situación que está pasando el Xerez, las posibilidades que hay, lo que puede pasar y nada más. No puedo decirle nada a nadie. Seguimos solos. El Xerez está sólo, la afición, la oficina, los jugadores, el cuerpo técnico, el que va por la calle estamos solos todos».

Para aquellos xerecistas que se pasan de optimismo y que aún confían ciegamente en que todo acabará solucionándose, Moreno también tiene unas palabras: «Digo que todo el mundo es consciente, pero sí que es verdad que uno argumenta lo que puede pasar y lo que piensa, y pasan unos días y hay que volver a decir porque, de alguna forma, se olvida. Sigue habiendo gente que piensa que el futbolista tiene asegurado el sueldo, que al final vamos a cobrar, que no se va a descender. La realidad es que sigue habiendo la posibilidad de un descenso y sigue habiendo la posibilidad de que no cobremos. Eso es así. Ojalá que al final cobremos, pero la posibilidad está ahí. Si el club el día 31 desciende no cobramos, si desaparece no cobramos. La posibilidad está ahí. Yo y mis compañeros habremos trabajado durante un año entero, porque se habla de cuatro y cinco meses, pero la realidad es que esas mensualidades pueden suponer el setenta o el ochenta por ciento del sueldo. Dependerá de cada uno, pero estamos hablando de bastante dinero. Sí es verdad que el futbolista gana bastante más dinero que la gente de a pie, pero esto está montado así. Al final cada uno reclama lo que le corresponde, lo que tiene firmado y lo que es suyo. Se debe una parte muy grande y la posibilidad de no cobrar está ahí».

De hecho, recuerda que «Porato terminó contrato con el Alavés y todavía no ha cobrado lo que trabajó hace dos temporada. Encima ese equipo está en Segunda. Si hubiera desaparecido no podría ni cobrar. Muchas veces hay que respetar todas las opiniones, pero es fácil opinar. Nosotros somos parte afectada, como muchos, y tenemos derecho a tomar nuestras decisiones».

El futbolista valenciano no descarta que el Xerez se agarre a la ley concursal. «Hay tres posibilidades. Una, que se solucione todo. Otra, que haya una ley concursal, que tampoco nos garantiza el cobro. Y otra, que desaparezca el club, y que tampoco te garantiza el cobro. La mejor para todos es la primera, la segunda es la peor para los acreedores, y luego está la última que es perjudicial para todos».

Poco que decir

Con una gran cara de circunstancias, Moreno explicaba los motivos por los que no quisieron realizar declaraciones tras la reunión de casi hora y media que tuvo lugar el jueves por la tarde. «No queríamos comentar nada porque no hay novedades. Es darle vueltas a lo mismo y estamos cansados. La realidad es la que es. Está cansada hasta la afición. Hay que esperar, no queda otra. Ojalá que se solucione».

Entretanto, en el vestuario «hay reuniones sin haber reunión. Mentiría si dijera que nos mantenemos al margen y no hablamos del asunto. Lógicamente, igual que cuando se juntan cuatro aficionados, también nosotros conversamos cuando estamos juntos».

Tras la reunión del jueves, Moreno y Mendoza entraron en el vestuario de Esteban Vigo, donde minutos más tarde accedió Miguel Ángel Rondán, pero según Vicente, «Miguel Ángel llegó sin estar previsto. Tampoco voy a decir lo que se habló o se dejó de hablar». Sí afirmó que «el míster es uno más. No puedo decir más, se lo preguntáis a él y que diga lo que piensa. Es uno más. Yo no quiero involucrar a nadie».

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