LA CIUDAD BURGUESA
PROFESOR DE LA UCA Actualizado: GuardarLa ciudad que recibe las Cortes y promulga la Constitución de 1812 es una ciudad culta. Efectivamente, el afincamiento en la ciudad de una emergente y emprendedora burguesía de negocios convierten a Cádiz en una de las grandes metrópolis del mundo occidental, que verá en el mundo de la cultura una de las formas de inversión de ese capital más eficaces para la rápida identificación del nuevo orden social que nace al amparo de esa misma burguesía. Una burguesía que también va a necesitar de unos códigos de conducta y representación pública que, frente a los sectores aristocráticos y plebeyos, sepan reflejar y mostrar, sin ningún tipo de ambigüedades, esas fortunas, como signos de una identidad social claramente diferenciada. Para la ciudad de Cádiz podría hablarse de una especie de Ilustración práctica, de fundamento mercantilista, que posibilita un fuerte cambio de clave ilustrada de un entorno, ahora burgués y, por tanto, muy necesitado de que ese mismo progreso económico pudiera verse desde el exterior. Por ello, sin duda alguna, va a imponerse unos modelos de vida urbana, sobre una base social burguesa, pero también sobre una sólida base cultural, cuyos epicentros estarán en los conceptos contemporáneos de Ilustración y Civilización. Dos conceptos que sirven de base a la Constitución de 1812. En esos años, la cultura se convierte, por tanto, en 'moneda de cambio'.