Fran González: «En lo electoral, el PSOE no ha sido competitivo en Cádiz»

Tres de los cuatro últimos candidatos del PSOE a la Alcaldía de Cádiz no acabaron el mandato. Teófila Martínez gobierna con mayoría absoluta desde 1995 y enfrentarse a ella desgasta como una lija. Fran González, con 33 años, menos de la mitad de años que su oponente, lo intentará en mayo. Tiene las encuestas en contra, a su partido de lado y todas las papeletas de sufrir. Pero con perfil autocrítico y discreto, asume el reto de recuperar dos décadas perdidas.

–¿Ha quedado para comer con Ana Camelo, como Zapatero con Iglesias?

–No. Pero cuando fue elegida secretaria general, le puse un mensaje para felicitarla. No comparto los planteamientos de Podemos, pero vienen a dar voz a gente que hace mucho tiempo que no se sentía representada.

–¿Le reñirán desde su partido como han hecho con Zapatero?

–La diferencia está en cómo se tienen esos contactos. Si se hacen con discreción y se le dan naturalidad o no. Yo tengo amigos, de verdad, en IU y en Podemos. De lo que se trata en política es de poder llegar a entendimientos. Eso de que mi partido me riña… Estoy en un partido para ser útil. A veces coincido y a veces no.

–Esa actitud proclive al entendimiento puede ser muy oportuna porque las opciones que le dan a su partido de gobernar en Cádiz pasan por pactar con otros partidos como Podemos, IU…

–El PSOE tiene que salir a ganar.

–¿Eso significa gobernar en solitario?

–Efectivamente. Otra cosa es lo que pase en la noche electoral con el mapa que salga. Cada uno tendrá que hacer la composición. No me puedo detener en con quién y qué voy a pactar. Los ciudadanos no lo iban a perdonar.

–¿Qué puede hacer un ayuntamiento para generar empleo? ¿Tiene margen real de maniobra?

–No estoy de acuerdo con los que creen que tienen poco margen de maniobra. Un ayuntamiento puede hacer mucho. A veces, sin gastar dinero. Este verano hemos visto que la gente se levantaba a la una y media de la madrugada de las terrazas. Hemos impulsado una plataforma para revisar esa legislación. Eso es liderazgo, eso es un ayuntamiento que quiere que su ciudad se beneficie del turismo, si quiere que genere puestos de trabajo.

–¿No teme que la práctica arruine la teoría? ¿No teme que le pese formar parte de un partido que, tras 34 años de gobierno autonómico, no ha reducido las espeluznantes cifras de desempleo? ¿Con qué cara lo dice?

–Lo digo con la cara de uno que tiene 33 años y admite que se han hecho muchas cosas mal en materia de empleo. Critico y sostengo que hay que empezar a cambiar muchas cuestiones. Nadie puede ignorar que la ciudad, y la provincia, tiene un problema estructural. Incluso en tiempos de bonanza ha estado muy por encima de la media en desempleo. Hemos propuesto planes pero admito que son hambre para hoy y hambre para mañana. Hay que cambiar la pedagogía, la mentalidad. Y un ayuntamiento debe liderar eso. Queremos ser una ciudad turística pero nos falta la vocación real. Nos falta la realidad. Los chiringuitos en la playa, con inversiones millonarias que han quedado en nada, son la prueba de eso. No lo digo desde el punto de vista partidista. Lo digo de todas las administraciones. Hemos propuesto el cinturón universitario. Tenemos que conservar tejido administrativo, las facultades. La marcha de la Escuela de Ingeniería es el ejemplo de lo que no debe suceder. No hablo de competir con la provincia. No quiero entrar en pelea con Puerto Real, Jerez y Algeciras pero tenemos que repartir la carga. No podemos perder estudiantes, centros, trabajo.

–Más que Teófila Martínez, el mayor obstáculo electoral para el PSOE es la gestión de la Junta, con el lastre de Tiempo Libre, Ciudad de la Justicia, Olivillo, nuevo hospital…

–El PSOE no va a renunciar al nuevo hospital. Lo digo claro.

–¿Por qué vamos a creer lo del nuevo hospital si ya lo contaron una vez?

–No podemos olvidar el contexto de crisis. Pero cuando haya un euro disponible, eso tiene que estar en marcha. Construir un hospital cuesta un dineral pero, cada año, el mantenimiento cuesta lo mismo que costó ponerlo en pie.

–¿Y que propone?

–Parar la sangría de población. Por eso hablo del cinturón universitario. Que la gente quiera quedarse en Cádiz. Y hay posibilidades. Hay que cambiar las prioridades. Cinco, diez, son los que especulan con la vivienda y con los locales, en la avenida, por ejemplo. El Ayuntamiento también tiene mucho que hacer ahí. Gravando los impuestos cuando un local esté vacío. Hay que ser proactivo.

–¿Hasta qué grado se siente responsable de toda la realidad que retrata, por pertenecer al PSOE?

–Más responsable me sentiría sin presentarme, si no intentara cambiar cosas.

–¿En qué momento decide presentarse como candidato cuando, en su primera rueda de prensa como portavoz municipal, dijo que no lo haría?

–En el momento en el que salgo de dos reuniones con vecinos llorando. El coro de La Viña cantó un tango sobre una mujer que lleva ocho años sin salir a la calle. Cuando ves eso, te da vergüenza estar en política y no intentar cambiar las cosas. He visto situaciones que te hacen salir llorando. En Cádiz hay una riqueza desaprovechada, un potencial patrimonial sin explotar. Que en esta ciudad lleguen los turistas y haya sitios cerrados…

–Incluyendo Museo Provincial y Teatro Romano, que dependen de la Junta que gobierna su partido…

–Sean de la administración que sean. Es que no puede ser.

–¿Tiene el PSOE un problema con la democracia interna? ¿No transmite esa actividad interna como problema?

–Me reconocerá que hemos tenido etapas más tranquilas.

–En este mandato, había concejales socialistas que ni se miraban pero ¿habrá un grupo municipal del PSOE que aguante cuatro años sin divisiones, sin dimisiones?

–Yo nunca he criticado en público a compañeros. Soy muy obsesivo y una de las obsesiones es que no hubiera divisiones internas. Por eso reivindico la tranquilidad que hay en estos momentos. Quiero que seamos conocidos por propuestas como el cinturón universitario. Pero entiendo que, a veces, no todo el mundo quiere dialogar. Yo no voy a polemizar públicamente, jamás, con ningún compañero. Es un error que el PSOE ha cometido en otros momentos.

–¿Aunque haya debacle electoral? ¿No habrá bronca? ¿No dimitirá?

–Palabra de honor.

–Usted apoyó con fervor a Pedro Sánchez como secretario general ¿Susana Díaz sabe lo vuestro?

–Tengo magnífica relación con ambos. Siempre he entendido que las lealtades son recíprocas. Yo necesito una presidenta de la Junta fuerte y un secretario general fuerte. Una vez que se han pronunciado las bases, no hay más que decir. Nunca he entendido que los compañeros se manifiesten en los medios.

–¿Qué responsabilidad tiene el PSOE en todo esto que nos pasa?

–Soy el primero en decir que el PSOE se ha equivocado en muchas decisiones. En Cádiz y a nivel nacional. No ha sido fiel a sus principios en muchas ocasiones. Y que Teófila Martínez ha hecho cosas bien, por supuesto. Pero el PP, en 20 años, también ha hecho muchas cosas mal en esta ciudad. Sea cual sea el resultado electoral, siempre asumiré que los ciudadanos nunca se equivocan. Si el PSOE lleva 20 años en la oposición en esta ciudad será porque no ha hecho las cosas bien, sin señalar a ningún compañero. Pero la realidad es que, desde un punto de vista electoral, el partido no ha sido competitivo.