Unos suben y ¿otros?

Sale un anuncio en la tele donde el admirado Matías Prats vende algo con esta frase; «se puede decir más alto pero no más claro». Así se ha manifestado Manuel Chaves con las ganancias del PP. Muy clarito dejó caer en una radio a nivel nacional, que «el Partido Popular está acostumbrado a ganar encuestas pero no elecciones». Dicen los afectados que ya se verá. Por ahora Arenas sigue subiendo, Sáez de Santamaría baja a Jerez y Rajoy está tan contento que, incluso, ya ha hecho propuestas para una nueva reforma educativa, -sería ya la enésima- pues nadie da con el punto, no ya exacto, sino medio para disminuir tan alto fracaso escolar. El PSOE por su parte acaba de implantar la última en el actual bachillerato con tal de que el estudiante no se aburra repitiendo y pueda llegar a una selectividad para iniciarse en la Universidad.

Hablando de Universidad, ahora todos los estudiantes querrán venir a la Hispalense. ¡Pero qué disparate es ese!. Finalizar o incluso aprobar un examen, conociendo el profesor que la maña o pericia del estudiante ha sido la chuleta. Dicen de la Hispalense que Medios de comunicación extranjeros han llamado para entrevistarlos y saber qué de verdad o bulo había en la noticia. Sorprendidos se quedaron cuando supieron que iban en serio.

Como en serio va el ERTE del Ayuntamiento de Jerez. Ahora hay sindicatos y voces en contra, pero más de uno ha denunciado la abultada plantilla del Consistorio. Han criticado que Pilar Sánchez, cuando llegó al cargo, no tomara medidas al respecto, aunque éstas fueran impopulares. ¿Y ahora?

Ahora puede ser un mal menor, como asegura la alcaldesa. Pero al ERTE habrá que sumar también, las rebajas de los técnicos que cobran más de 55.000 euros al año. O lo que es lo mismo, unos 5.000 euros al mes. Así mismo como ya se ha dicho -habrá que ver si se cumple- los de tenientes de alcaldes y concejales que llegan, cada mes, al medio millón de las antiguas pesetas. A nadie le gusta que le rebajen las retribuciones, pero menos, que le dejen sin empleo. Que pregunten a los más de 27.000 jerezanos. ¿O no?