Bárcenas: «No es mi letra»

La tormenta por el 'caso Bárcenas' está muy lejos de arreciar. Ayer el epicentro de la polémica desatada por los supuestos pagos irregulares a dirigentes del Partido Popular se desplazó hasta Berlín donde el presidente Mariano Rajoy volvió a salir al paso de los rumores desmintiendo las informaciones publicadas en los últimos días. El rosario de declaraciones y reacciones del día acabó con la intervención del extesorero del PP quien afirmó que el cuaderno de 14 páginas filtrado por 'El País', donde se recogen las anotaciones de los supuestos movimientos ilegales, "ni existe ni ha existido nunca".

"En consecuencia, esa letra no es mía", ha afirmado Luis Bárcenas, en una entrevista a 13TV, contradiciendo las distintas pruebas grafológicas difundidas en los últimos días que señalaban que los apuntes de las notas habían sido escritas por Bárcenas. Tras defender en repetidas ocasiones que él “no es la fuente de una filtración “que le enfrentaría con su compañeros y amigos del partido", ha afirmado que está dispuesto a someterse a cualquier tipo de prueba de caligrafía e incluso a someterse al polígrafo para demostrar "la falsedad de la publicación" de esas notas. Ha indicado, además, que confía plenamente en la Justicia, a lo que ha añadido que “todo lo que he hecho lo volvería a hacer de nuevo”.

"Existe una operación de acoso y derribo contra el partido y, especialmente, contra Mariano Rajoy", ha denunciado haciendo suya uno de los argumentos más repetidos en los últimos días desde Génova. "Está orquestada por aquellos que no tienen otra forma de acceder al poder", ha remachado en una clara crítica a los socialistas, cuyo líder, Alfredo Pérez Rubalcaba pidió ayer al presidente que abandonase la dirección del Ejecutivo tras haber "ligado su suerte a la de Bárcenas". “Ni Mariano Rajoy ni ningún directivo o empleado del Partido recibió sobresueldos”, ha explicado, a la par que ha mostrado su disposición a declarar y dar las explicaciones que hagan falta.

Operaciones bursátiles personales

Sobre el dinero encontrado en las cuentas en Suiza, ha sostenido que es parte "de su actividad personal" y que corresponde a inversiones bursátiles ajenas"por completo" a la actividad del Partido. Estas operaciones en Bolsa no "supondrían ningún tipo de incompatibilidad" con la función que desarrollaba en Génova. Bárcenas ha argumentado que ese dinero "se ganó honradamente" aunque ha reconocido que quizá no actuó de forma "totalmente correcta".

Sobre el asunto de las donaciones, ha querido matizar que estos pagos se hacían por "talón o transferencia", y en ningún caso "existían cobros en metálico" en referencia a las supuestas prácticas destapadas en las últimas horas que explicaban que el extesorero llegó a cobrar 600.000 euros de una empresa de la construcción y anotó tan solo 144.000 euros en los registros financieros de la formación a la que pertenecía.