conflicto en el país africano

Argelia cierra su frontera con Malí

Los cruentos combates entre grupos salafíes y el Ejército regular han motivado la decisión de Argel

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Las autoridades argelinas han anunciado el cierre de la frontera con Malí, país este último escenario de cruentos combates entre grupos salafíes que controlan los territorios septentrionales y el Ejército regular, apoyado desde hace tres días por tropas francesas.

"Hemos informado a la parte maliense de las medidas tomadas para el cierre de la frontera, que ya ha sido asegurada tras los últimos acontecimientos ocurridos en Malí", ha dicho el portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores argelino, Amar Belani, en unas declaraciones recogidas por la agencia oficial argelina APS.

Belani ha insistido en que Argel defiende la preservación de la integridad territorial de Malí, la lucha contra el terrorismo y el crimen internacional organizado y la búsqueda de una solución política a la crisis maliense. En este sentido, el portavoz ministerial ha señalado la necesidad de tomar en cuenta "las reivindicaciones legítimas de la población del norte del país y de los actores que estén calificados para ese diálogo".

Belani ha subrayado como condiciones para sentarse entorno a una eventual mesa de negociaciones el total "rechazo del terrorismo y del crimen organizado de manera inequívoca y la renuncia a poner en cuestión la integridad territorial de Malí". "Este diálogo, por el que siempre ha abogado Argelia, es esencial para una solución duradera y definitiva de la crisis", ha recalcado Belani.

La ofensiva salafista

El pasado diciembre, el grupo radical islámico Ansar al Din y el independentistas Movimiento Nacional de Liberación de Azawad (MNLA) ratificaron en Argelia su compromiso al cese de hostilidades con Bamako y a entablar un diálogo con las autoridades centrales. Sin embargo, a principios de enero, Ansar al Din anunció el fin de dicha tregua y el lunes pasado lanzó una ofensiva contra la ciudad maliense de Kona, situada en el centro-este del país, recuperada por las fuerzas regulares gracias a la intervención militar francesa.

Argelia, que se ha mostrado reticente a una intervención militar en Malí, abrió su espacio aéreo a los aviones franceses que participaron en la ofensiva contra la insurgencia salafí, según informó el domingo el ministro de Asuntos Exteriores francés, Laurent Fabius. Una medida sobre las que las autoridades argelinas aún no se han pronunciado. El pasado día 12, el Gobierno argelino justificó la intervención francesa al calificarla de una "decisión soberana" de Malí. "Esta es una decisión soberana de Malí, que ha pedido ayuda a varias potencias amigas", entre ellas Francia, "para reforzar su capacidad nacional en la lucha antiterrorista", indicó entonces Belani.