Puyol vuelve a lesionarse

Carles Puyol está gafado con las lesiones, la última una luxación en el codo izquierdo sufrida este martes en el estadio Da Luz de Lisboa, según el primer diagnóstico de urgencia, y que le tendrá de baja en un período aún por determinar. El capitán azulgrana no sale de una y se mete en otra. Ytiene el enorme mérito de que lucha por cada balón como si fuera el último. A sus 34 años, el defensa de la Pobla de Segur (Lleida), se emplea con la ilusión de un alevín.

La imagen de televisión causó dolor solo de verla y puso los pelos de punta. Ganaba el Barça 0-2 ante un desdibujado Benfica en la segunda jornada de ‘Champions’ y el choque estaba visto para sentencia, pero Puyol no entiende de relajaciones. Saltó con ímpetu en busca de un balón en el área lisboeta, a la salida de un córner, no encontró apoyo, y cayó mal, con todo el peso sobre el brazo. Se le luxó de tal manera que el codo apareció por el lado contrario. Le dio tiempo a mirarse, levantar el otro brazo y llamar a las asistencias. Al momento se comprobó la gravedad de su lesión y fue retirado en camilla, entre los aplausos de los aficionados lisboetas.

‘Puyi’ se rompió el mismo día en que regresaba tras acortar de nuevo los plazos. No hay pronóstico de baja que se le resista. Lo que en principio iban a ser entre cuatro y seis semanas de baja por el estiramiento del ligamento cruzado de la rodilla izquierda que sufrió en el campo del Getafe han sido poco más de dos semanas y media. Parecía complicado que Puyol pudiese reaparecer a tiempo para medirse al Real Madrid, pero su evolución fue tan rápida que le dio tiempo a ser titular ante el Benfica.

Las previsiones más optimistas apuntaban a que Puyol tendría que estar de baja por lo menos un mes, entre el 15 de septiembre y el 15 de octubre, aproximadamente, pero es un prodigio físico. Aceleró la recuperación hasta tal punto que ha sorprendió a quienes mejor le conocen: los médicos, los fisioterapeutas, los recuperadores y en especial, sus propios compañeros.

Pero volvió a romperse, ahora en otra articulación, y tendrá que volver a empezar. No estuvo en la Eurocopa, acudió a la final para celebrar el título logrado en Kiev por la selección española, y sigue sin ver cumplido su sueño de disputar el partido 100. Pero volverá a tope.