El fundador de Wikileaks quedará en prisión preventiva hasta la próxima vista de extradición

El fundador del portal Wikileaks, Julian Assange, autor de la revelación de miles de documentos confidenciales del Gobierno de EEUU, permanecerá en prisión preventiva hasta que se celebre la próxima vista de su proceso de extradición, el 14 de diciembre.

Assange, de 39 años, fue detenido esta mañana cuando acudió de forma voluntaria a una cita con agentes de la unidad de extradición de Scotland Yard en una comisaría de Londres, después de que el Reino Unido recibiera una orden europea emitida por la Fiscalía sueca para interrogar a Assange. Según portavoces policiales, el fundador de Wikileaks "está acusado de un cargo de coerción, dos cargos de abuso sexual y un cargo de violación, todos supuestamente cometidos en agosto de 2010".

El juez Howard Riddle del tribunal de Magistrados de Westminster ha rechazado la petición de la defensa para que concediera la libertad bajo fianza a Assange. Su negativa se ha basado en el argumento presentado por la fiscal Gemma Lindfield referente tanto a los riesgos de incumplimiento por parte del acusado como a la propia seguridad del director de WikiLeaks, que en las últimas semanas ha publicado miles de documentos secretos del Departamento de Estado de EEUU.

Con aspecto tranquilo y pálido, el dueño del portal que ha puesto en jaque a la diplomacia estadounidense ha asegurado ante el tribunal que luchará contra su extradición a Suecia, ya que, según su abogado, Mark Stephens, teme que desde ahí pueda ser entregado a EEUU, donde algunos políticos de ese país han llegado a pedir su ejecución.

Gran expectación mediática

En una vista que ha durado una hora y que ha estado rodeada de gran expectación mediática, Lindfield, representante legal de las autoridades suecas en este proceso, ha detallado ante el magistrado los cuatro cargos de agresión sexual contra dos mujeres que supuestamente cometió Assange el pasado agosto en Suecia.

El letrado John Jones, del equipo legal del australiano, ha recordado que con anterioridad un fiscal de Estocolmo había desestimado el caso por "falta de pruebas" para que, posteriormente, un nuevo fiscal lo "resucitara" en una ciudad diferente, Gotemburgo. "Bajo tales circunstancias", ha añadido Jones, su cliente se resistía a la extradición por considerarla una medida "desproporcionada".

Por su parte, el juez Riddle ha observado que las acusaciones eran "extremadamente graves", aunque ha reconocido que no se tienen suficientes detalles. "Si son ciertas, nadie podría argumentar que hay que conceder la libertad bajo fianza al defendido -ha explicado el magistrado-, pero, si son falsas, (Assange) sufre una enorme injusticia si se le mantiene bajo custodia. En este momento, la naturaleza y alcance de las acusaciones no se conocen".

A la salida del tribunal, ante decenas de periodistas, el abogado de la defensa, Mark Stephens, ha adelantado que volverá a presentar una nueva solicitud de libertad bajo fianza para su cliente y ha confiado en la "imparcialidad de la Justicia británica". Stephens ha asegurado que WikiLeaks "continuará filtrando documentos" pese a la detención de su fundador y ha reiterado su convencimiento de que existe una "motivación política" detrás de este proceso, así como sus dudas respecto a la "solidez de las acusaciones", que ha calificado de "muy frágiles".

Apoyo de personalidades

El caso ha desatado una enorme atención mediática y numerosos periodistas, cámaras de televisión y fotógrafos han custodiado la entrada del tribunal, donde también se ha congregado un grupo de simpatizantes de Assange con pancartas de apoyo. Asimismo, nombres conocidos como el cineasta británico Ken Loach, el veterano periodista australiano John Pilger, defensor de los Derechos Humanos, o la millonaria Jemima Khan, hermana del diputado tory Zac Goldsmith, implicada en causas sociales, ofrecieron avalar la fianza de Assange.

Loach, que ofreció la cantidad de 20.000 libras (23.735 euros), al igual que Pilger, en concepto de fianza, ha calificado el trabajo realizado por Assange de "servicio público". Por su parte, Pilger, que se ha declarado amigo personal del acusado y ha señalado tenerlo "en una gran estima", ha considerado "absurdos" los cargos presentados contra él en Suecia y ha recordado también que "ya fueron así valorados por un fiscal allí cuando se desestimó el caso hasta que intervino un político".

WikiLeaks tuvo que trasladar forzosamente la pasada semana su servidor a Suiza tras ser retirado de las compañías de internet estadounidenses. El portal, según el abogado Mark Stephens, está siendo objeto de "un enorme número de ciberataques" por haber difundido en los últimos días el contenido de miles de documentos clasificados de EEUU con información confidencial sobre mandatarios y Gobiernos de diferentes países.