La alcaldesa traslada a la Junta las demandas de los pescadores de la chirla

Representantes de casi una veintena de barcos que se dedican a la pesca de la chirla en el puerto de Bonanza, en Sanlúcar, que aglutina en la localidad a medio centenar de familias que viven directa o indirectamente de la pesca del molusco, han mantenido hoy una reunión con el delegado territorial de Agricultura y Pesca, Federico Fernández en la sede de la Confradía de Pescadores, en el que la alcaldesa de la ciudad, Irene García, ha trasladado al representante de la administración autonómica la petición de realizar un ajuste en el horario de captura establecido reglamentariamente para así poder hacer rentable su trabajo y permitir que el puerto sanluqueño trabaje en igualdad de condiciones que el resto.

Irene García explicó que la ciudad, precisamente por su privilegiada situación geográfica, se ve afectada por estar situada en la zona de reserva de Doñana, lo que conlleva que durante determinadas épocas del año se cierre el caladero para mejora de la propia pesquería. Ello significa que el puerto de Sanlúcar se encuentra más alejado de la zona pesca y que los horarios de captura y venta supongan una mayor dificultad para los pescadores sanluqueños, que piden un ajuste de dicho horario. Es una demanda que, según dijo, ya conoce la administración andaluza.

Al término del encuentro, Federico Fernández aseguró que a pesar de que la solicitud se ha realizado con cierta premura, “vamos a trabajar para dar una respuesta a corto plazo, porque se trata de un sector que atraviesa un momento difícil”.