Cómo coger en brazos a un niño sin dañarse la espalda

Es una tarea importante y potencialmente peligrosa, sobre todo cuando tenemos que repetirla cantidad de veces al día. Sin embargo, no todos sabemos cómo coger a un niño sin que sufra nuestra espalda. La foto de la izquierda nos indica la postura incorrecta (la más común) y la de la derecha, la correcta.

En la primera imagen, nos redondeamos como una tortuga y de esta forma solo conseguimos que la espalda tenga menos fuerza y esté menos protegida. Como además dirigimos el peso del niño hacia arriba, y no hacia nuestro cuerpo, el dolor está asegurado.

En cambio, en la imagen de la derecha, lo estamos haciendo bien: flexionamos las rodillas, de tal manera que nos ayudamos de la fuerza de la espalda y también de las piernas. Además, acercamos al niño hasta nuestro cuerpo porque todo lo que está lejos es mucho más pesado de levantar y de manejar que algo que está junto a nosotros.