La moda se reinventa para no morir con la crisis

El sector textil está de capa caída y trata por todos los medios de reinventarse para no morir en esta crisis. El año pasado su producción cayó de media un 10,1%, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). En cuanto al futuro, los empresarios del segmento -agrupados en la patronal Acotex- son pesimistas. La recesión ha sido devastadora, las ventas de ropa se desplomaron un 10,12% en 2008 y un 7,8% en 2009, los dos años más duros para la economía. Más de 19.000 empleados acabaron en la cola del paro y 10.000 comercios tuvieron que echar la persiana, según cálculos de la propia industria.

La alta costura no se libra de esta debacle. Grandes firmas como Jesús del Pozo viven momentos difíciles. Sirva de ejemplo lo ocurrido en esta última edición de la pasarela Cibeles, a la que ya no acudieron diseñadores de la talla de Miriam Ocariz o Lidya Delgado. «Las grandes marcas ya no tienen salida entre la gente normal», recalca la periodista experta en moda Alicia Herrero, y explica que ahora muchos no dudan en mezclar primeras firmas como Chanel, Louis Vuitton o Gucci con prendas de bajo coste, de las cadenas H&M, Primark o Lefties.

Internet ha hecho el resto para recortar el negocio de los comercios. Durante 2010 la moda 'online' se ha disparado un 15% y ya cuenta con 1,68 millones de compradores en España, según un estudio de la consultora Kantar Worldpanel. A la vez que ganan terreno las boutiques digitales -Zara y Springfield abrieron sus divisiones de venta electrónica el pasado año-, los expertos indican que la moda de mañana ya no desfilará por las grandes pasarelas de París, Milán o Nueva York. A partir de ahora, la distancia con los escaparates se reduce a un solo click de ratón. La moda urbana, el llamado 'street-style', es lo último. Chicos y chicas normales (con un poco de estilo) cuelgan en sus blogs sus fotografías más elegantes para compartir con el resto de visitantes su forma de vestir.

Precisamente, la principal tienda del emporio de Amancio Ortega se ha dado cuenta que el 'street-style' es una buena opción de negocio y por eso la pasada semana pusieron en marcha la web People!. Los internautas más coquetos podrán subir sus propias fotos, y nadie duda que servirán de inspiración para futuras colecciones de la casa. La única exigencia es que, al menos, porten dos prendas principales de la última colección primavera-verano de Zara. Cada semana esta aplicación publicará una selección de las fotos y premiará con 300 euros a cada uno de sus espontáneos modelos.

Triunfo de la tienda virtual

Esta es la novedad más destacada de una tienda digital que se inauguró hace casi medio año. Su primer trimestre fue un éxito rotundo de resultados. Cada día atiende una media de 5.000 pedidos y se calcula que su facturación podría llegar a los 200 millones de euros al año, más que cualquiera de sus tiendas reales.

Zara no es, sin embargo, pionera en 'street-style'. Hace tres años se inauguró la web Chicisimo. Una página a la que los internautas suben fotos, etiquetan las prendas que lucen e intercambian sus opiniones con el resto de visitantes. «Mi mujer y yo vivíamos en San Francisco y contemplamos cómo algunas chicas se sacaban una foto antes de salir de casa y la subían a sus blogs, y por eso decidimos poner en marcha esta iniciativa», explica el cofundador de esta web, Gabriel Aldámiz-Echevarria. El negocio para este emprendedor reside en actuar como intermediador entre los visitantes a esa página y las empresas.

El profesor de la IE Business School y gurú de Internet, Enrique Dans, describe esa página como «un motor de búsqueda para localizar prendas y complementos en función de su marca, color y tipo». Chicisimo recoge las tendencias más habituales entre sus usuarios y esto puede servir, indica Aldamiz-Echevarria, para que las marcas apuesten por la «autenticidad» y hagan que su ropa llegue a más gente. En su último estudio, por ejemplo, sacan a relucir que los colores más habituales siguen siendo el negro y el blanco y que los diseños de H&M y Zara son los más recurrentes entre estas modelos urbanas.

«Antes los diseñadores imponían. Ahora ellos proponen y cada uno elige lo que quiere vestir», asegura Nagore de Garamendi, administradora del blog 'Fashion is my profession', y afirma que en los últimos tiempos «hay cosas más interesantes en la calle, que en las pasarelas». Las bitácoras de moda, sin ninguna duda, están cogiendo fuerza en este mundo. Tal es así que la prestigios revista 'Time' colocó al blog The Sartorialist entre los 100 agentes con más influencia en el mundo del diseño y el estilo.