La belleza de evocar el mar de Cádiz en sólo tres versos

Casi doscientos poetas de todo el país y parte de Latinoamérica han evocado los paisajes de Cádiz y su mar en sólo tres versos. Los haikus japoneses cada vez cuentan con más adeptos en Occidente y esta vez el tema era Fernando Quiñones y la Playa de La Caleta. Ayer se entregaron los premios del 'I Concurso de Haikus Caleteros' de la Fundación que lleva el nombre del poeta gaditano. Fue en el Centro Unicaja de Cultura, dentro del programa de actos en honor de Quiñones previsto para estos días.

El jurado leyó en primer lugar los nombres de los ganadores. «Si nos fijamos/no hay nada tan quieto/ como las olas» fue el poema que se llevó el primer premio, cuyo autor, David Benedicte (Madrid), no pudo acercarse a recoger el galardón. Los otros dos textos premiados fueron los del periodista gaditano Javier Osuna y del poeta local David F. Monthiel. «Ha sido difícil porque yo no soy poeta», comentaba ayer Osuna «Ha sido mi guiño sentimental a Quiñones, que apadrinó un libro que yo publiqué, 'El lenguaje de la mar de Cádiz'». Tras la lectura de los ganadores, el jurado leyó una selección de los mejores haikus. Versos que hablaban del rumor de las olas, de castillos, aguas azules, salitre y mujeres. Pero sobre todo, de poesía. El acto terminó con un concierto de Fernando Lobo, que leyó algunos de sus propios haikus y desgranó los temas de su disco 'Vengo'. Por la tarde, llegó la principal cita musical, el concierto de Javier Ruibal, que congregó a una gran multitud.