Prosiguen las autopsias a los militares muertos mientras dos de los heridos siguen en la UVI
Eloisa Gómez,suegra del militar isleño Javier Muñoz fallecido en la explosión de ayer, cuenta la desolación que embarga a la familia
San Fernando Actualizado: GuardarLos tres infantes de Marina que sufrieron heridas ayer jueves en una explosión accidental en la Academia de Ingenieros de Hoyo de Manzanares, que provocó la muerte a cinco militares, continúan ingresados en el Hospital militar Gómez Ulla
Los dos heridos graves son el teniente José Manuel Candón Ballesteros, nacido en la localidad gaditana de Medina y el sargento Raúl A. González Fernández. Ambos permanecen en la Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI). El tercer hospitalizado es el cabo 1º J. Herminio Alvarez Gómez, que resultó herido leve y se encuentra en planta desde ayer.
Funerales
El funeral por los cinco militares muertos ayer en unas prácticas de desactivación de explosivos en la Academia de Ingenieros de Hoyo de Manzanares está pendiente de concretar hasta que no concluyan las autopsias, mientras que dos de los tres heridos en el accidente siguen bajo vigilancia intensiva.
De acuerdo con la ministra de Defensa, Carme Chacón, una vez que concluya la autopsia que se está practicando en el tanatorio de Colmenar Viejo (Madrid) a los cuerpos de los cinco militares, éstos serán entregados a sus familias, quienes decidirán si habrá un funeral conjunto y, en ese caso, será entonces cuando se fije la fecha.
Mientras tanto, dos de los tres heridos en la explosión permanecen hospitalizados en la unidad de vigilancia intensiva del Hospital Gómez Ulla, después de ser intervenidos quirúrgicamente, según ha explicado la ministra.
El cabo primero que resultó herido leve, a quien Chacón visitó ayer en el hospital Puerta de Hierro para interesarse por su estado, evoluciona favorablemente.
El accidente en el que murieron los cinco militares, entre los que se encuentran algunos de los mayores expertos en desactivación del Ejército, que acababan de volver de Afganistán, tuvo lugar en el campo de maniobras de Hoyo de Manzanares al estallar varias minas anticarro que intentaban destruir durante un ejercicio de neutralización de minas.
