DESCANSANDO. Blanch, en el escenario del Falla, donde ha estrenado la comedia 'Aquí un amigo'. / NURIA REINA
Contraportada

Jaime Blanch Ahora soy un delincuente habitual»

-Tiene usted mala cara.

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-Normal. La gente piensa que los actores estamos todo el día de fiesta, que hay mucha juerga entre bastidores. Pero llevamos diez días concentrados en un cortijo, ensayando mucho y durmiendo poco. En cuanto pille la cama...

-Fuera de los escenarios y de los platós, ¿cuál ha sido la mejor actuación de su vida?

-Una vez maté a mi madre. Estaba haciendo la mili, con 18 años, cuando me llamaron para La gran familia, así que decidí desertar, al menos por un mes. Luego me entró miedo y me inventé una excusa. Le dije al oficial de turno que mi madre había muerto.

-¿Y coló?

-Vaya que si coló. Cuando regresé al cuartel, me dio el pésame toda la tropa. No veas qué caritas.

-¿Y qué le dijo su madre?

-Que era un hijo de puta. Pero luego lo entendió.

-¿Ejerce de madurito sexy, o es que le sale solo?

-De sexy ya me queda bien poco. Ahora me toca preocuparme por la salud. Estoy intentando dejar de fumar (da una larga calada a su cigarro).

-Por lo que parece, no hay manera.

-Los compañeros no se cansan de pedirme que no fume en los escenarios cuando ensayamos. La Ley Antitabaco me ha criminalizado. Ahora soy un delincuente habitual.

-¿Qué más cosas sabe que ya nunca podrá hacer?

-Sé que no podré cambiar. Lo bueno es que tampoco me importa.

-Reconozca que, como todos los actores, tiene un ego desproporcionado.

-El ego es intrínseco al hecho de ser actor. Hay que ser un poco exhibicionista para dedicarse a esto, incluso un punto vanidoso. Pero te aseguro que siempre he sido muy tímido y que mi ego no es ni patológico ni incontrolable. Es normalito.

-¿Alguna manía?

-Cada vez que llego a un hotel, cambio los muebles de sitio

-¿A quién le daría el Goya a la peor interpretación de las pasadas elecciones generales?

-A Mariano Rajoy, por su papel como El increíble hombre nada. Ex aequo con la Conferencia Episcopal.

-Los obispos no se han presentado.

-Pero deberían. Desde aquí les recomiendo que formen un partido propio, y que lo llamen el Partido de la Ostia Bendita. Mucha gente los votaría.

-¿No le da miedo la crisis?

-La clase media española vive en un estado de crisis permanente. Con altibajos, pero dentro de la tragedia cotidiana de no llegar a fin de mes. Me dan más miedo sus voceros. Los que van a utilizarla como excusa.

-¿Qué siente cada vez que cae el telón?

-Lo mismo que cuando pongo los pies en el suelo, después de subir a la montaña rusa. Ufff...

dperez@lavozdigital.es