Zapatero considera "un asunto de Estado" los intereses de las eléctricas españolas

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha asegurado que tras la contraopa lanzada por la alemana E.ON sobre Endesa, el Ejecutivo respetará las reglas del mercado, pero ha matizado que considera "un asunto de Estado" los interses de las eléctricas nacionales en España y en Iberoamérica.

Sobre la posibilidad de hacer uso de la "acción de oro", prerrogativa que permitiría al Gobierno vetar la operación en virtud de la participación del Estado en Endesa, Zapatero ha asegurado que "no está contemplado" su uso por el Ejecutivo, aunque ha subrayado que esta prerrogativa está aún "vigente".

La operación tiene dimensión comunitaria, tal como la define el reglamento europeo de fusiones, por lo que corresponderá en principio a la Comisión Europea (CE) aprobar o no la operación.

El reglamento atribuye a la CE el examen de una operación si el volumen de negocios conjunto de las empresas implicadas supera los 5.000 millones de euros en el mundo o los 250 millones en la UE. Los dos umbrales son superados con gran holgura en este caso: E.ON, mayor suministrador privado de energía a escala mundial, anunció hoy una facturación de 56.400 millones de euros en 2005; Endesa contabilizó ese año ventas por 17.508 millones.

La única salvedad prevista en el reglamento es que las empresas tengan más de dos tercios de su facturación en un mismo Estado miembro, en cuyo caso Bruselas cedería el examen a la autoridad responsable en ese país, como ocurrió en el caso de la opa de Gas Natural sobre la misma Endesa, aprobada con condiciones en España.

Pese a la evidencia de las cifras, la Comisión no quiso ayer especular sobre la tramitación de la opa. Su portavoz de Competencia, Jonathan Todd, se limitó a recordar que corresponde a E.ON verificar sus cifras de negocio y las de Endesa y decidir sobre esa base si le notifica la OPA.

Preguntado sobre la operación, el comisario europeo de Mercado Interior, Charlie McCreevy, señaló por su parte que "estamos haciendo un seguimiento, pero de momento no vamos a anticipar lo que vamos a hacer en el futuro".

De confirmarse el escenario del examen europeo, la CE deberá analizar si la fusión refuerza o no posiciones dominantes de forma que se creen "obstáculos significativos" a la competencia en el mercado europeo o en una parte sustancial del mismo.

En diciembre de 2004, la comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, vetó sobre esa base el intento de Electricidad de Portugal (EDP) y la italiana ENI de comprar a Gas de Portugal (GDP).

El pasado diciembre, la CE autorizó sin embargo a E.ON a adquirir, bajo ciertas condiciones, las actividades de comercio al por mayor y almacenamiento de gas del grupo petrolero y gasístico húngaro MOL.

Si la OPA de E.ON sobre Endesa sale adelante daría lugar a la mayor empresa de electricidad y gas del mundo, con más de 50 millones de clientes repartidos en más de treinta países y una plantilla de 107.000 empleados, según la compañía alemana.