Agentes ayudan a sus compañeros heridos tras el atentado suicida. /REUTERS
y 58 heridos

Un ataque suicida en Pakistán causa al menos 26muertos, la mayoría policías

El kamikaze ha hecho estallar la carga explosiva ante la sede del Tribunal Superior de Lahore, cuando los agentes intentaron detenerlo

ISLAMABAD Actualizado: Guardar
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En el atentado más sangriento desde el asesinato de la ex primera ministra Benazir Bhutto, al menos 26 personas, la mayoría policías, han muerto hoy y unas 58 han resultado heridas en un ataque suicida perpetrado ante la sede del Tribunal Superior de Lahore, en el este de Pakistán.

El suicida, que conducía una motocicleta, hizo estallar la carga explosiva que portaba a las 11.43 hora local (06.43 GMT), cuando los agentes intentaron detenerlo, minutos antes de que se celebrara una protesta de abogados que se habían reunido en la sede de la corte contra el régimen del presidente Musharraf. La carga estaba formada por 14 kilogramos de explosivos y que cuatro de metralla

Aunque el portavoz de Interior, Javed Iqbal Cheema, situó en cinco el número de agentes muertos, fuentes policiales y del hospital Mayo, el más cercano al lugar, han asegurado al canal privado Dawn que prácticamente todas las víctimas eran agentes.

Según una fuente del hospital, tres personas que viajaban en dos coches, un motociclista, dos triciclos motorizados y un carro arrastrado por un caballo saltaron por los aires por la explosión. Por su lado, la Policía de Lahore ha asegurado que son 19 los agentes muertos en el ataque.

"En alerta roja"

Las fuerzas de seguridad se habían desplegado en la zona para vigilar una de las frecuentes manifestaciones de abogados contrarios al régimen del presidente paquistaní, Pervez Musharraf.

El portavoz de Interior ha asegurado que el ataque "iba dirigido contra la Policía" y explicado que el Gobierno ha puesto las cuatro provincias paquistaníes "en alerta roja". La zona ya ha sido acordonada y los heridos han sido trasladados a los hospitales más cercanos.

"Les dije a los agentes que no podían dejar pasar a todo el mundo a esta zona, que era peligroso, pero no me hicieron caso", dijo a Dawn un abogado de Lahore.

Musharraf ha condenado el ataque, el primero de gran magnitud desde la muerte de Bhutto, y ha ordenado una nueva "minuciosa" investigación para esclarecer el atentado.