Portugal abre una línea telefónica para denunciar abusos de la Iglesia
Empieza a funcionar la comisión independiente que busca casos desde 1950
Portugal se sumerge de lleno en la transparencia encomendándose a la recién creada Comisión Independiente para el Estudio de los Abusos Sexuales en la Iglesia Católica Portuguesa. El órgano se pondrá manos a la obra próximamente para investigar todos los casos ocurridos desde 1950 hasta la actualidad. Una exhaustividad inusual que, de momento, no cuenta con una réplica en España. Pero el asunto no queda ahí al otro lado de la frontera porque ese comité inspector se compromete a remitir las denuncias a la Fiscalía General . Objetivo: que las pesquisas no queden en saco roto y contribuyan realmente a esclarecer los hechos, así como a limpiar la imagen que percibe la población de las instituciones religiosas.
Todo el proceso se simplifica muchísimo para que se agilice sin tapujos en la práctica. Por esa misma razón, puede rellenarse un formulario en la web darvozaosilencio.org (‘dar voz al silencio’) que detalle las circunstancias que la persona en cuestión recuerda sobre lo acontecido en el supuesto de considerarse víctima.
Pero los usuarios tienen otras dos opciones: una es enviar un correo electrónico a geral@darvozaosilencio.org contando la negativa experiencia y otra más la constituye una llamada telefónica a este número de móvil: (00 351) 91 711 00 00, especialmente habilitado para la ocasión. Incluso se prevé una posibilidad adicional para que el flujo de denuncias no se detenga: concertar una cita en persona con la idea de contar todo a un miembro de la citada comisión.
El programa de denuncias, que incluirá la consulta de los archivos de las diócesis , no se dilatará de manera innecesaria, sino que la Conferencia Episcopal Portuguesa acota los plazos en aras de concretar las cosas y después tener tiempo suficiente para elaborar un informe que esclarezca los distintos casos. Con posterioridad, la Iglesia lusitana decidirá qué líneas de actuación establecerá.
La comisión garantiza que, a finales de este 2022, estará terminado el proceso múltiple de recogida de testimonios, que se efectuarán preservando en todo momento el anonimato de los potenciales denunciantes.
El presidente de la conferencia de obispos, José Ornelas, es el impulsor de la investigación. «No tenemos tenemos nada que esconder», dijo durante la presentación. La principal meta de las pesquisas es «lograr la reparación de la dignidad todas y cada una de las víctimas».
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