El Gobierno quiere que los profesores no «regalen» dos horas semanales
La ministra de Educación eliminará los ajustes que aplicó el Gobierno de Rajoy
El Gobierno socialista de Pedro Sánchez ha iniciado su agenda social con dos anuncios de impacto mediático y social en Sanidad y Educación. Con una clara intención de diferenciarse del Ejecutivo de Mariano Rajoy , ha anunciado la derogación de los reales decretos que aplicaban ajustes en estas dos áreas. Sin embargo, una parte de las medidas ya estaban revertidas, por lo que sus propuestas tienen un carácter más propagandístico que real.
Entre las medidas que no han sido eliminadas, se encuentra la relativa a la jornada lectiva semanal de los profesores de ESO y Bachillerato, que pasó de 18 a 20 horas semanales. Por lo tanto, si el Gobierno cumple sus promesas, los profesores volverán a trabajar menos horas.
Si en el primer Consejo de Ministros anunció que devolverá la sanidad universal, ayer, la ministra de Educación , Isabel Celaá, aseguró en el Congreso que es « interesante que, en el menor tiempo posible, se vayan revirtiendo las medidas que afectan a la Educación».
La titular de este departamento ministerial aprovechó su respuesta a una pregunta de Podemos, en la sesión de control al Gobierno, para pronunciarse sobre la intención del Ejecutivo en relación a la posible derogación del Real Decreto 14/2012. Esta nueva regulación del sistema educativo tenía como objetivo ahorrar unos 3.000 millones de euros. El Gobierno tuvo que adoptar estas medidas como consecuencia de la crisis económica y la necesidad de reducir el déficit y alcanzar la estabilidad presupuestaria.
La ministra reconoció que algunas de estas medidas comenzaron a modificarse en 2016. Pero, en cualquier caso, precisó que «este ministerio tiene disposición para que se reviertan aquellas medidas que han suscitado más polémica en la comunidad educativa, por el deterioro que han supuesto para la calidad de nuestra educación».
«En un plazo razonable»
El inicio de este proceso de reversión afecta también a las comunidades autónomas y a la universidad, como así lo recordó Celaá: «Ello aconseja iniciar el diálogo lo antes posible para poder presentar avances en un plazo razonable». Aunque la diputada de Podemos, Ione Belarra , le instó a «que se comprometa con claridad con una fecha concreta», la ministra lo dejó en manos de la negociación con las comunidades.
De las medidas recogidas en el Real Decreto, las que todavía no están revertidas supondrán un aumento del gasto por parte de las Comunidades Autónomas . El Ministerio de Educación tendrá que superar la negativa de estas administraciones a aumentar el gasto público, como venía sucediendo hasta ahora.
Uno de los puntos de la normativa del Gobierno de Rajoy que no se aplica es el precio de las matrículas universitarias. El exministro Íñigo Méndez de Vigo ya anunció que en el presupuesto de este año se bajaba la horquilla del precio de la primera matrícula universitaria. Así del 15-25 % que podían aplicar las autonomías, se pasaba al 0-25. Ello supone que en algunas regiones se podría aprobar la matrícula gratuita.
También se ha eliminado la tasa de reposición y la ratio alumno/aula. Hay que recordar que, mientras la tasa de reposición fue inferior al 50%, las administraciones podían ampliar hasta un 20% el número máximo de alumnos . Una vez que la tasa de reposición del profesorado volvió a ser del 100% en 2016, la ratio de alumno por aula volvió a ser la recogida en la normativa básica. Por tanto, en Educación Primaria pasó de 30 a 25 alumnos máximo, en ESO, de 36 pasó a 30, y en Bachillerato, de 42 a 35.
Igualmente, en 2017, se redujo el límite inferior de los precios de los máster no habilitantes para acercarlos a los habilitantes y a los grados. En los presupuestos de 2018 se da un paso más y se propone minorar el límite inferior de los grados hasta 0.
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