Las obras de la calle Real obligan a reordenar el tráfico en el casco urbano

Las obras de reasfaltado que en estos días se están ejecutando en la calle Real, una de las arterias longitudinales más importantes de la ciudad, y utilizada para cruzar de oeste a este todo el casco antiguo, han provocado un auténtico caos de tráfico en la zona centro de la ciudad.

De esta forma, la travesía se ha visto afectada a lo largo de toda su extensión, en la que sólo se ha exceptuado el tramo correspondiente a las calles Nueva-Ancha, por tratarse de éste de un tramo con pavimento distinto, ya que alberga la Iglesia de Jesús María y José. Esto ha motivado que el cruce de la calle Real con otras vías como Soledad, Ancha, La Palma o Cruz Verde se haya convertido en un auténtico tapón para los vehículos que circulan por el centro.

Esta situación ha motivado que el Ayuntamiento desvíe la circulación hacia la avenida de México, las glorietas de la Gasolinera y 512 así como a la carretera de Circunvalación y calle Caña en el tránsito hacia el casco urbano.

Además, la obra ha provocado un cambio en las paradas de las líneas de autobuses. De esta forma, la parada de la plaza de la Iglesia se traslada ahora a Circunvalación esquina con Concepción, mientras que en la barriada del Cartabón se ha optado por desplazarla uno metros más hacia delante.

La actuación abarcará la totalidad de la calle Real, empezando por la calle Rosario y terminando en la calle Manuel de Falla. Todo ello tendrá un coste de algo más de 30.400 euros, que saldrán del Plan de Inversiones recogido en el Presupuesto actual.

Facilidad de obra

Al ser una calzada que cuenta con un anchura considerable, de una media de cuatro metros, la facilidad de esta actuación va ayudar a la rapidez en su ejecución. Por otro lado, hay que destacar que no existe red de saneamiento en la calzada, sino que las redes de agua, energía eléctrica y telefonía discurren por el acerado, a lo que hay que sumar la prohibición de aparcar a lo largo de la vía. Estas circunstancias harán que en poco tiempo, a lo más la semana que viene según las estimaciones municipales, los trabajos se vean culminados con las mínimas molestias para el tráfico y la población.

Esta no será la única obra que se acometa en las próximas fechas, ya que cuando culmine el reasfaltado de la calle Real, se procederá al de la calle Amargura en el tramo comprendido entre Las Olas y la calle Factoría de Matagorda, en la barriada de Marina de la Bahía. Esta zona constituye, según la memoria redactada por Oficina Técnica, uno de los ejes fundamentales del tráfico rodado en dirección Norte-Sur.

El tramo donde se actuará tiene una longitud de 364 metros, con un ancho de calzada de siete metros. En lo que respecta a las instalaciones, existe red de saneamiento con pozos de registro y husillos para la recogida de pluviales.

La actuación que se realizará será la misma que la que se está ejecutando en calle Real: fresado del pavimento actual, saneamiento de socavones y extensión de capa de rodadura de seis centímetros de espesor, respetando las pendientes existentes para garantizar la perfecta evacuación del agua de lluvia a los sumideros.