«Quiero que la mujer se sienta a gusto con la ropa que se ponga»

La diseñadora Juana Martín parece haberse convertido en especialista en cerrar Cibeles. El pasado septiembre, en la edición dedicada a las propuestas que se van a llevar para esta primavera-verano, se encargó de mostrar su estilo flamenco, racial, y colorista, aquel que traslada el tradicional traje de gitana a nuevas cuotas de libertad, sensualidad y elegancia.

Ahora es todo distinto. Ya no es la sorpresa de la debutante que logró poner en pie el recinto ferial de Ifema, sino una artista que empieza a consagrarse, a encontrar su sitio en la escena de la moda española. Y en esta metamorfosis también se ha topado con un ambiente distinto en Madrid.

«Ahora -reconoce- hay más presión en todo: mediática, en moda, en repercusión internacional...». Claro, dice sin decirlo, que la pasarela madrileña se ha beneficiado en cierta manera de la situación «catalana» tras el cierre de Gaudí. Así, en su opinión, «Cibeles es ahora la cita española con mejor imagen internacional, la que mejor imagen tiene». El trabajo de esta modista que en 1999 empezó su andadura en la moda no ha pasado desapercibido, ni en la última edición del Salón Internacional de Moda Flamenca -donde sus colecciones han sido premiadas varias veces- celebrado la pasada semana en Sevilla ni en puntos tan dispares como Japón.

Allí, su inconfundible esencia étnica ha despertado interés hasta el punto de que la semana que viene le van a hacer un reportaje en su Córdoba del alma para un periódico del país del sol naciente.

Pero lo de dar el salto al extranjero es un cantar que prefiere tomarse con mucha tranquilidad. Quiere consolidarse primero en Cibeles y luego ir paso a paso hasta llegar a París, Milán o Nueva York. Mientras tanto, es una fuente continua de proyectos. «Hemos sacado una línea de joyería flamenca», avanza.