CÁDIZ

Rentabilidad a largo plazo y burocracia, los principales escollos

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Las nuevas normativas que se avecinan son, sobre el papel, un ideal, pero en la práctica, habrá que solventar muchos problemas para cumplirlas. Por ejemplo, la burocracia en la solicitud de las ayudas, algo que afecta sobre todo a las pequeñas y medianas promotoras. También plantea problemas la tramitación de las dos líneas de ayuda (la estatal y la regional). Además, los propietarios no tienen deducciones en el IRPF, al contrario de lo que sucede para las empresas (que desgravan un 10% de la inversión). Unido a ello, desde el IDAE se reconoce que la instalación en unifamiliares sale más costosa que en edificios.

En cuanto a la rentabilidad el propio Plan de Energía Renovable reconoce que la amortización se logra a largo plazo.

Otros problemas añadidos son la falta de incentivos para desarrollar instalaciones innovadoras o la necesidad de formar a los técnicos municipales.