Gallineras y San Onofre se echarán a la calle si no se aclara su situación urbanística

Los vecinos de las barriadas de Gallineras y San Onofre podrían tomar el relevo de los de La Almadraba en lo que a realización de actos reivindicativos y de presión ciudadana se refiere. Los habitantes de dichas zonas sienten que desde los distintos grupos que forman la Corporación local no están siendo claros acerca de la situación en la que quedarían sus terrenos en el próximo, y actualmente paralizado, Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

Desde la Gerencia de Urbanismo se han intentado calmar los rumores que apuntaban a expropiaciones y derribos de viviendas de cara a la regeneración de la zona, maniobra que no hecho olvidar a la oposición una cierta falta de transparencia política en el tratamiento de dichas barriadas. Actualmente, tanto socialistas como populares coinciden en señalar la solución al problema de Gallineras y San Onofre como una condición obligatoria para dar su aprobación al borrador del PGOU.

El presidente de la Federación de Vecinos Isla de León, Antonio Romero, aseveró que desde Urbanismo le habían asegurado que dichas viviendas no corrían peligro alguno, «ya que no sólo no iban a ser expropiadas ni derribadas, sino que verían incrementado su nivel de edificabilidad. Romero también detalló que los vecinos estaban de acuerdo con la regeneración de la zona, «siempre que existiese claridad en el proceso y se aclararan una serie de puntos».

A la espera del resultado de sucesivas reuniones con el Consistorio y con la oposición, las más de 300 familias afectadas han fijado sendas movilizaciones para los próximos días 11 y 25 de febrero.