Cultura

Concluyen las excavaciones en la necrópolis de Monte Bajo

Las cuatro estructuras funerarias de la Edad del Bronce halladas escondían restos óseos, ajuares y objetos líticos

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El azar y la naturaleza, a través de la sequía, se aliaron en 2004 para que una pareja de vecinos de Benalup realizase uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes de la provincia en los últimos años. Desde entonces, y hasta principios de 2006, un grupo de arqueólogos ha realizado unas excavaciones de ur-gencia para devolver a la luz la necrópolis de la Edad de Cobre del Paraje de Monte Bajo en Alcalá de los Gazules.

Tras la recuperación de una cueva artificial -denominada Es-tructura 1- en 2004 por parte de los arqueólogos Lorenzo Perdigones y Alfonso Pando, las labores de excavación se reanudaron el pasado agosto, descubriéndose «tres estructuras funerarias de tipo constructivo mixto que sirvieron de osario a una comunidad asentada en la comarca durante el III milenio a.C.», tal y como explicó ayer María Lazarich, di-rectora de esta segunda excavación realizada por un equipo de la Universidad de Cádiz.

A la espera del análisis completo de los restos encontrados -de los que muchos serán sometidos a una prueba de radiocarbono en un laboratorio de Florida-, de momento, el equipo de la doctora Lazarich ha podido deducir que se trataba de enterramientos de tipo secundario, es decir, que los difuntos eran enterrados después de realizarles complejos rituales, ya que «no se han encontrado los restos en complexión anatómica».

Además, y gracias a los elementos de prestigio que se han encontrado en los ajuares -cristal de roca, cuentas de varicita o colorante cinabrio-, se deduce que no se trataba de tumbas comunes, sino de «personas de prestigio y alto rango», lo que hace pensar que eran «miembros de una sociedad puente de las tribales comunitarias a las clasistas iniciales que dieron lugar a los primeros estados de la Baja Andalucía», explicó Lazarich.

Es más, es muy posible que los enterramientos «estén relacionados con los autores de las pinturas rupestres del Tajo de las Figuras» y de las demás manifestaciones gráficas prehistóricas encontradas en Sierra Mo-mia, lugar próximo a la ubicación de la necrópolis.

Abundantes objetos

En esta segunda fase de la excavación se han localizado un total de tres estructuras funerarias, en cuyo interior se hallaban restos de más de setenta individuos -no conservados en muy buen estado-, así como abundantes objetos pertenecientes a los ajuares y productos líticos.

Sin lugar a dudas, la estructura que más sorpresas ha deparado a los arqueólogos ha sido la tercera, una cueva artificial excavada en la roca que, siendo la más pequeña de las tres, es la que más objetos contenía. Entre los más de noventa hallados, el más llamativo ha sido una hoja de 35 centímetros de longitud -a la que sus descubridores han bautizado como Excalibur ya que fue hallada clavada en una piedra- y que, según Lazarich, podría ser «el cuchillo más largo encontrado en la península Ibérica».

Junto a restos cerámicos perfectamente conservados y con gran cantidad de materia orgánica -seguramente comida y bebida- en su interior, también se han hallado puntas de flecha, elementos de hoz, piedras pulimentadas y pigmentos de color. Además de los humanos, también se han hallado dos restos cánidos -en la segunda estructura- que seguramente pertenezcan a lobos por la forma de su mandíbula.

Aunque los hallazgos de la primera excavación se encuentran en el Museo de Cádiz, el futuro emplazamiento de los objetos descubiertos ahora aún no ha sido definido, pues, como anunció ayer el alcalde de Alcalá de los Gazules, «ya que se está trabajando en la creación de un museo provincial, se estudiará la posibilidad de que albergue algunos de estos restos que van a ser un punto de referencia de la arqueología de la provincia».