La Escolanía María Auxiliadora cierra su gira anual con un concierto Navideño

Con el concierto del pasado viernes en la Iglesia del Carmen se cierra una pequeña gira con la que han llevado durante el mes de diciembre su música a diversas poblaciones. Estas navidades han actuado en Vejer de la Frontera, Arcos y Sevilla. En Cádiz lo han visitado la Iglesia de San José, el Seminario de la calle Compañía, la capilla del Colegio de las Salesianas, el Teatro Falla y recientemente la Iglesia del Carmen.

El repertorio estuvo compuesto por villancicos tradicionales de países sudamericanos (Venezuela, Chile y Argentina) así como por otros típicos de Estados Unidos y de países europeos como Inglaterra, Alemania y, como no, de carácter puramente español. Los temas versionados son obras que van desde el siglo XVI hasta el XX. A partir del año 2000 la coral cuanta con la compañía del pianista J. Alberto Guillén Ruiz, pieza clave sobre la que descansan los arreglos instrumentales de todas las obras. Además cuenta al órgano con Mayte Mariscal Romero y al violonchelo por Ana Mariscal Romero, antigua coralista.

Son pocas las oportunidades de escuchar este grupo y es que, como dicen por ahí, «nadie es profeta en su tierra». Es así que sus mayores éxitos los ha cosechado fuera de la ciudad, donde ha sido reconocida y galardonada en muchas ocasiones. Aunque desde su creación ha participado en multitud de encuentros y certámenes con otros coros de Andalucía, también ha participado en siete concursos en los que ha conseguido cinco primeros premios y dos segundos premios a nivel andaluz, el último de ellos compitiendo en modalidad única con adultos.

Este coro está dirigido por Antonio Hernández Asencio desde que él mismo lo fundó en 1997 en el Colegio de las Salesianas donde trabaja como profesor de Música. En principio estaba formado únicamente por alumnas del colegio que al ir creciendo y pasando a otros centros han seguido vinculadas al coro.

En palabras de Antonio, su director: «Esta es una de las mayores satisfacciones, ver como niñas que empezaron con nueve años siguen aún siguen fieles. La sensibilidad que demuestran, el estilo que adquieren, el saber estar en cada momento, la capacidad de concentración y el ambiente musical del que se impregnan es un gran logro en los tiempos que corren».

En la actualidad la Escolanía está en búsqueda de algún patrocinador que ayude y respalde los proyectos que se quieren llevar a cabo. En este sentido la única manera de sostener económicamente su actividad es cantando en bodas. Hay mucho trabajo detrás y está muy poco reconocido, por eso el apoyo de las instituciones es fundamental.

Aún así el trabajo totalmente desinteresado de su director Antonio Asensio y el pianista Alberto están dando sus frutos. El nivel musical al que se ha llegado es alto y el camino a seguir es la superación. Una mezcla explosiva que los llevará aún más lejos con sus sueños, sus proyectos, sus voces y su tremenda ilusión.