OPINIÓN

Parada biológica

Vamos a hacer una parada de un año para intentar regresar con más fuerza en el siguiente concurso si se puede

La mayoría de vosotros conocéis que esta vez los autores de nuestro coro, el de los Niños, hemos decidido hacer un descanso temporal carnavalesco. Vamos a hacer una parada de un año para intentar regresar con más fuerza en el siguiente concurso si se puede.

Nuestro grupo es de los pocos que descansa cada cierto tiempo, no por ello es menos apasionado de nuestra fiesta. Los descansos son buenos para el cuerpo y la mente. Hay grupos y autores agotados mentalmente desde hace años pero no paran nunca. Piensan, porque a alguno se lo he leído en las redes, que descansar no es ser gaditano de pro, que ellos llevan mil años saliendo y no les hace falta hacer un descanso nunca, que tienen fuerzas para ser el último bastión de la copla. Le presento mis respetos a esos que no quieran o no puedan detener lo de salir o preparar una agrupación cada año, todos somos libres de seguir un camino, pero también pido respeto para aquellos que pretendemos hacer una pequeña parada biológica cada vez que nos apetezca.

El salir o crear una agrupación cada año es para algunos un mérito añadido a su vida. Para mí es solo un hobby, una afición más, que cuando se convierte en obligación deja de serlo y se convierte en una tremenda trampa.

El descanso carnavalesco tiene sus ventajas. Un año sabático se convierte en un tiempo de relax porque no tienes que salir cada noche a los ensayos, no tienes que aprender un repertorio, puedes dedicar las tardes al paseo, a leer, a ver la Champions, a cantar otras cosas, a la familia, los autores no tenemos que crear ni invertir horas y horas para ello, no tienes que aguantar criticas y crónicas de nadie y para mas ventajas no tienes los días del calendario pisándote los talones.

Pero aunque tenga sus ventajas hay muchos inconvenientes también, el primero es que a medida que se va acercando la fecha del concurso lo vas echando de menos. Echas de menos todo lo bueno que tiene. La creatividad, la competición, la música, la teatralidad, la sociabilidad diaria con tus compañeros y sobre todo la reacción y el aplauso del público y seguidores.

Otro gran perjuicio de hacer una parada es la espantada de componentes hacia otros grupos. Son pocos los que se van y luego regresan a tu grupo para concursar contigo de nuevo. A algunos en el fondo se les agradece que no vuelvan pero otros muchos dejan marcas en el alma. Algunos prefieren no parar por probar algo nuevo, porque tienen amigos allí donde van, otros buscando un premio, muchos por la afición envenenada que llevan en las venas y no pueden parar y otros por ocupación, que no es lo mismo que por afición. Desde aquí la mejor de las suertes para tod@s ell@s.

Otro desbarajuste que ocasiona el descanso es la pérdida, si no lo sujetas bien, del local de ensayo. Es un bien tan preciado hoy día que resulta indispensable conservarlo. El grupo se puede retomar, es más, la mayoría de las veces sale reforzado por gente joven y abierta de mente, pero el lugar del ensayo está por día más complicado conseguirlo y hay que mantenerlo como oro en paño.

Descansar un año es positivo, pero siempre se corren muchos riesgos y tal vez por eso, aunque hayan muchos que lo estén deseando, solamente nos atrevamos a hacerlo unos pocos.

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