Empresas de Cádiz facturan entre el 60 y 80% de sus beneficios en Navidad

Tras aguantar las abatidas más fuertes de la crisis, las empresas gaditanas afrontan una Navidad más la campaña con toda la esperanza que la época proclama. Con el deseo de que lo peor haya pasado. Las cifras han caído sin piedad desde hace más de cinco años y eso ha podido afectar a las cuentas pero no a los ánimos que la supervivencia empuja con fuerza.

«Somos como la gente del campo. Trabajando la cosecha todo el año para aguantar el verano», cuenta Fermín Mesa, propietario de Sobrina de las Trejas, una de las empresas más señeras de la provincia dedicadas a la repostería tradicional de Medina.

Y es que desde noviembre la actividad en la factoría no para, como cuenta el propietario.

Al ser completamente artesanales y no llevar conservantes la caducidad les marca el calendario. «No podemos adelantar mucho la fabricación». Alfajores, amarguillos, tortas pardas, bombones trufas, yemas, pan de Cádiz, y ahora, turrones y polvorones son algunas de las especialidades que se han probado ya por toda España y que desde 1852 se llevan amasando en esta empresa familiar.

«Hay clientes que se crean en agosto cuando nos visitan y se enamoran de nuestros dulces para siempre». Tanto es así que desde Medina salen estos días a diario unos 20 paquetes de dulces con diversos destinos gracias a la venta online.

«Somos ya la quinta generación de la familia en el negocio y ya se prepara la sexta», cuenta Fermín. «Mi padre ganaba dinero todos los meses», afirma el empresario consciente de la importancia de la Navidad en su producción.

Cerca de Sobrina de las Trejas otra de las empresas ‘marca Cádiz’ trabaja estos días también a destajo. Es Aromas de Medina. Más joven, con 58 años de historia, es otra de las empresas con mayor prestigio nacional de la repostería tradicional gaditana. «Somos una empresa estacional», explica José Joaquín Barrios, desde 2004 director comercial.

«En estos últimos días se decide bastante pero puede que la campaña navideña signifique un 80% de nuestra producción anual». Tanto es así que si durante el año tienen unos doce empleados, en Navidad la plantilla asciende hasta el medio centenar para que así salgan en temporada alta hasta 3.000 kilos de dulces al día.

«Nuestro producto estrella es por supuesto el alfajor». Al respecto de la proclamación local que pide que este dulce no sea considerado estacional, vinculado directamente a la Navidad, Barrios se muestra más reticente: «Es algo cultural. La gente lo asocia a esta época porque es la fecha por excelencia del dulce. Quizá si lo tuviéramos todo el año con la misma fuerza nos cansaríamos de él».

De nuevo el boca a boca ha sido una de las claves del éxito de estos productos asidonenses. «Recibimos autobuses de Sevilla, Málaga y Huelva, entre otros lugares, que vienen en visitas concertadas a comprar». Y desde hace cuatro años por la tienda on line reciben pedidos de toda España, «e incluso de gente que nos compra desde Chiclana o Cádiz».

Las queserías de la Sierra también son otro de los negocios que estas semanas viven su particular ‘agosto’. Más aún si recientemente han arrasado en los World Cheese Awards con hasta 19 galardones y eso ha ayudado a su promoción. Tras «unos comienzos difíciles» los hermanos Ramón y Miguel Gago han conseguido alzar a ese pódium sus quesos de El Bosqueño. «Mucha gente nos conoce en Navidad. La mesa y el plato es nuestra mejor carta de presentación», cuenta Miguel. «Antes del puente de diciembre han aumentado mucho las ventas», asegura.

Quesos de Cádiz con sabor a éxito

El Bosqueño, que mantiene la producción durante todo el año, no aumenta plantilla durante estas fechas. «Somos catorce y lo que hacemos es planificar». «Somos conscientes que estos días conseguimos muchos clientes nuevos, gente que prueba nuestros productos por primera vez y luego quiere repetir». De hecho, El Bosqueño abrió las puertas de la provincia hace tiempo y siguen creciendo ya que distribuyen a tiendas gourmet o especializadas de toda España. «También en Alemania, Bélgica y Francia. Allí se sorprenden del sabor distinto que tiene nuestros quesos».

En Montesierra, la gran distribuidora de productos ibéricos de la provincia con sede en Jerez, llevan preparando la Navidad desde finales de verano. «Ya se comienza a preparar los pedidos, seleccionar jamones y todos los trabajos previos a la campaña», cuenta Loreto Martín, responsable de Marketing. «En la facturación anual de la empresa estas fiestas pueden suponer entre un 30 y 40% del total». Madrid, Barcelona y toda Andalucía son destinos habituales de sus productos que también se pueden comprar en alguna de sus tiendas y probar en el restaurante «a pleno rendimiento estos días».

Otro rincón en la provincia donde estos días no se ha parado ha sido en Barbate. Allí, el paraíso del atún y las conservas, empresas como Herpac han estado «hasta arriba». Así lo confirma su director comercial y de marketing, José María Vázquez. «El boom en las cocinas del atún rojo nos ha ayudado bastante de unos años para acá. Nos ocurre cada Navidad pero ésta quizás hemos notado un repunte». Según explica, las ventas en tienda también crecen. La conserva del atún rojo, la mojama y el salmón son los productos más demandados. «Salen también muchos lotes y baúles para regalos».

La piel de Ubrique, un regalo

Los hermanos Alejandro y Jorge Oliva junto a Miguel Pérez llevan marcado el negocio de la piel de Ubrique desde que nacieron. Desde su empresa El Potro son también testigos privilegiados de cómo la Navidad ayuda a que el negocio tome aire. «En nuestra facturación anual, las ventas de estas fechas pueden suponer un 20 por cierto», cuenta Alejandro Oliva. Tanto es así que han tenido que reforzar con nuevo personal las tiendas que tienen por toda España.

«Desde el verano trabajamos en la campaña pero somos una empresa artesana por lo que hay que dedicar a la producción entre dos y tres semanas». Según Oliva este año han notado una «ligera recuperación». «Hemos pasado épocas muy duras pero eso también te hace seguir adelante y saber por dónde es mejor coger para llegar». Para El Potro además ha sido muy importante el aumento en la venta on line. También en Navidad. «Nos compran ya desde todas partes de España y del mundo. Los bolsos y complementos, lo que más se regala».

Aunque las ventas de vino se reparten entre todo el año, es cierto que durante la Navidad se incrementan las compras de otro tipo de caldos más selectos o diferentes al consumo habitual. «En cuanto a los vinos de Jerez durante las fiestas se abre el abanico», explica Pedro Muñoz de Arenilla, director comercial de la empresa Exclusiva Bahía de Cádiz, distribuidora y comercializadora de vinos con tienda y sede en El Puerto de Santa María. «La gente en estas fechas suele consumir más olorosos, palos cortados, amontillados. Y también buenos vinagres de Jerez para postres», cuenta.

Y el consumo es mayor. Tanto en la hostelería como en casa con comidas y cenas familiares. Además, el que elige una botella está dispuesto a pagar más. «De gastarse cinco euros pasan a una mayor calidad botellas de entre los 12 y 15 euros». Esto ocurre en las tiendas y las distribuidoras pero en las bodegas tampoco se para. La actividad es total para que no falte de nada en las mesas esta Navidad. «Y si son productos de Cádiz, mejor que mejor».