Sesenta sacerdotes españoles forman parte del millar de presbíteros de todo el mundo que podrán absolver los pecados reservados al Papa durante este Año Santo de la Misericordia.
Estos 1.071 «misioneros de la misericordia» podrán perdonar pecados poco frecuentes como la profanación de formas eucarísticas, la absolución a cómplices en pecados sexuales, la ordenación de obispos sin permiso, la ordenación sacerdotal de mujeres o la rotura del secreto de confesión.
El padre Jesús Higueras es uno de ellos. «Es una gracia de Dios muy grande y una gran responsabilidad», explicó ayer el párroco de la iglesia Santa María de Caná en Pozuelo de Alarcón (Madrid) y colaborador de ABC.
«El Papa nos ha pedido que anunciemos el Evangelio de la misericordia y que lo hagamos con cariño en el confesionario, ya que las personas que se acercan ya están dando un paso para el arrepentimiento», recordó. El padre Higueras será uno de los mil sacerdotes que concelebrará junto al Papa la misa de este Miércoles de Ceniza.
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