El Papa desembarca en Instagram con un mensaje: «Rezad por mí»

Una imagen sobria y tradicional ha sido la escogida en su debut en el «confesionario» virtual. El Papa ha desembarcado en la plataforma Instagram, una red específica para publicar imágenes y que, con sus 400 millones de usuarios, es una de las más populares en la actualidad.

Coincidiendo con el tercer aniversario de la misa que marcó el inicio de su pontificado, su Santidad se ha presentado en esta plataforma con el nombre de Franciscus en aras de compartir su mensaje de amor, ternura y misericordia con la comunidad. Lo ha hecho con una fotografía suya en un rezo privado, de rodillas, rezando, y con la frase «Rezad por mí» escrito en nueve idiomas, inglés, español, italiano, árabe, francés, portugués, polaco, alemán y latín.

Pray for me Rezad por mí Pregate per me صلوا من أجلي Priez pour moi Módlcie się za mnie Rezem por mim Betet für mich Orate pro me

Una foto publicada por Pope Francis (@franciscus) el 19 de Mar de 2016 a la(s) 4:24 PDT

En un tono cariñoso y directo Francisco ha querido abrir un espacio en lo que considera una oportunidad para llegar a los feligreses. «Inicio un nuevo camino, en Instagram, para recorrer con ustedes el camino de la misericordia y de la ternura de Dios», había anticipado horas previamente el Papa en su perfil en la red de «microblog» Twitter, en donde está presente, a petición de Benedicto XVI, su antecesor, en diciembre de 2012.

El Papa ha reconocido en anteriores ocasiones la importancia de este tipo de plataformas de internet, muchas de ellas que gozan de gran popularidad como Facebook o Twitter, para promulgar el Evangelio y llegar a todos los rincones del planeta.

El debut en esta plataforma se produce después del encuentro que mantuvieron el Papa y el director general de Instagram Kevin Systrom en el Palacio Apostólico el pasado mes de febrero. El fundador de la red social le otorgó con un libro que seleccionaba diez imágenes publicadas por algunos de los «instagramers» más relevantes.

Allí aparecían desde fotografías que demuestran la situación de los migrantes en Oriente Medio y los efectos del cambio climático en el ártico, hasta el terremoto en Nepal en 2015. Un detalle que, a su juicio, ilustra el poder de las imágenes para unir a las personas en momentos y crisis globales.